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LA PRENSA/Cortesía

El brillante desempeño de la industria del puro en Nicaragua en medio de la pandemia. EE. UU. sorprende al sector

El crecimiento de los ingresos provenientes del tabaco contrasta con la caída global en los ingresos por zona franca en el 2020, cuando hubo una contracción de 14.68 por ciento, es decir 425 millones de dólares menos a la economía respecto a los resultados en el 2019.

Nicaragua consiguió el año pasado 254.5 millones de dólares en exportaciones de tabaco, lo que significó un crecimiento de 17.39 por ciento más con relación al año anterior cuando se registró 216.7 millones de dólares bajo el régimen de zona franca, según datos que recoge el informe anual del Banco Central de Nicaragua.

La Cámara Nicaragüense de Tabacaleros (CNT) expresó su sorpresa por el crecimiento en medio de la pandemia, especialmente con la reacción del mercado de Estados Unidos, fuertemente golpeado por la crisis sanitaria mundial que ocasionó cierre de varios Estados durante meses o semanas, lo que hacía temer en Nicaragua que la demanda de puros se contraería, pero no fue así.

El presidente de la Cámara Nicaragüense de Tabacaleros, Claudio Sgroi, dijo que el año pasado enviaron solo a Estados Unidos 186 millones de unidades de puros, esto  significa 10 por ciento más que lo enviado en 2019, una tendencia que parece mantenerse en el 2021, lo que ha inyectado de optimismo al sector.

Según las cifras del Banco Central de Nicaragua, el tabaco se mantuvo como el tercer producto de mayor exportación a través del régimen de zona franca, solo detrás de los envíos de productos textiles y arneses. A través de este régimen arancelario especial ingresaron el año pasado en total 2,469.1 millones de dólares, de los cuales el 10.30 por ciento fue aportado por la industria del tabaco, que se desarrolla principalmente en el norte del país.

El crecimiento de los ingresos provenientes del tabaco contrastan con la caída global en los ingresos por zona franca en el 2020, cuando hubo una contracción de 14.68 por ciento, es decir 425 millones de dólares menos a la economía respecto a los resultados en el 2019.

“Le puedo decir que estábamos muy asustados en un principio  porque empezaron   a cerrar  fronteras  y a encerrar a  la gente, entonces pensábamos  que el 2020 sería un  mal año, pero no. La industria  se  creció y  creo que la industria del  tabaco fue la  que menos se afectó por la pandemia porque  se nota en  el  crecimiento que tuvimos”, resaltó en declaraciones a LA PRENSA.

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¿A qué se debió el crecimiento de la venta de puros pese a la pandemia? Sgroi dice que la calidad del puro nicaragüense sigue siendo determinante en el aumento de la demanda en los mercados internacionales, aún con la pandemia.

“Los  miembros de la  Cámara Nicaragüense (de Tabacaleros) están entre  los mejores tabacaleros del mundo, entonces la calidad es la primera  virtud. La segunda  razón es el hecho que en  muchos países donde  todo estaba cerrado, la gente se quedó en su casa y se buscó  actividades,  entonces la gente  tuvo  tiempo para ellos mismos,  para poder disfrutar de un puro, de  poder disfrutar de  cosas  que antes no hacían  tanto  y también  el  sistema de  compras en línea  nos ayudó mucho a agilizar el  comercio, sobre todo  en  los Estados Unidos donde se vio el mayor incremento de  consumo”, resaltó.

Los precios de los puros premium  se han  mantenido casi iguales en los mercados internacionales, es decir entre siete  y doce dólares  la unidad,  aunque  las exportaciones se hacen  por cajas y depende de la  marca  el número de puros que introduzcan  en  el empaque.

“Nicaragua  tiene  precios muy  competitivos, pero el hecho de que el  puro  es elaborado a mano, todo natural con  tabaco que hay mucho trabajo  atrás para llevarlo al  punto de  producir el puro,  entonces  a nivel  mundial  es puro premium apetecido”,  explicó.

Durante la pandemia la Cámara de tabacaleros trabajó  para  que  hubiera mucha  educación  e información  para evitar el contagio del coronavirus. “Nosotros como gremio  tabacalero empleamos a 42,000 personas, entonces es un  trabajo  muy  grande  para  operar bajo protocolos de prevención de Covid-19; se hace  uno de mascarillas,  lavado de manos,  se lavan  las  superficies de altos contactos,  los proveedores no  entran  a la fábrica,  sino  que entregan  afuera,  entonces nosotros seguimos nuestros protocolos de  prevención”, manifestó.

El  sector tabacalero  espera  crecer  más que ese 10 por ciento  experimentado en  2020, pero  afirman  que es muy temprano para dar  cifras futuras.  Lo que sí  dijo  Sgroi  es que con  la gran demanda de puros premium y tabaco en  ramas  por parte de  otros  países productores,  se está invirtiendo mucho  para responder a la demanda, aunque tampoco  precisó los montos.

Actualmente los puros nicaragüenses  están en más de 60 países  a nivel mundial. Sin  embargo,  la Cámara continúa el trabajo para abrir otros mercados. “Pero nosotros estamos posicionados en los mercados  más grandes  y  Europa es nuestro  segundo mercado más  grande,  cada país  puede  ser  un  mercado  pequeño, pero reunidos los 27 países,  son  nuestro segundo destino”, señaló.

El desafío del sector

Pese a la buena salud de la que goza la industria del tabaco en Nicaragua, el sector afronta varios desafíos, especialmente en lo relacionado con los costos de producción en materia de electricidad y combustibles. Muchas de las fábricas de puro en  Nicaragua utilizan bombeos de  agua para regar las plantaciones de tabaco y  eso  significa que mientras más elevado esté el  precio de los  combustibles, mayores serán  sus costos de producción,  expresó el  titular de la CNT.

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“El problema de los costos fijos  en  dependencia del  alza de los  combustibles a nivel mundial es algo que enfrentan  diferentes empresas,  no  solo  las fábricas de  puros”, sostuvo, al tiempo que agregó que  migrar a la utilización de paneles solares es algo  complicado por los precios pero  que ya ciertas  compañías lo empiezan a  implementar.

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