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Meylin Obregón Leiva salió de su casa el 8 de febrero en compañía de su hijo Wilton Gutiérrez Obregón. LA PRENSA/Cortesía

Meylin Obregón viajó con su hijo Wilton y sus sobrinos gemelos hacia EE. UU. Solo los hermanos de 15 años lograron pasar

Misael Obregón, hermano de la nicaragüense, cuenta que en el trayecto hacia EE. UU. Meylin y Wilton se separaron de sus hijos gemelos para que estos se entregaran a las autoridades. Como son menores, ya se encuentran en Miami con él mientras Wilton sigue bajo custodia y Meylin secuestrada

Una mujer trabajadora, humilde, a quien le gusta la jardinería. Así describe Misael Obregón a su hermana Meylin del Socorro Obregón Leiva, una nicaragüense de 30 años que hoy se encuentra secuestrada por bandas criminales de México, quienes piden por su rescate cinco mil dólares. Ella fue capturada luego de ser deportada desde Estados Unidos con su hijo Wilton Gutiérrez Obregón por haber ingresado a ese territorio de forma indocumentada.

Meylin nació y vivió hasta hace mes y medio en la comunidad El Paraíso, Presilla, Caribe Sur de Nicaragua. Ahí también conoció a Lázaro Gutiérrez Laguna, con quien tuvo una relación durante 13 años y con quien procreó dos hijos: Delvin Johan y Wilton Eniel Gutiérrez Obregón. Este último es el niño migrante nicaragüense que fue encontrado en la frontera sur de Estados Unidos, el 1 de abril pasado, pidiendo ayuda porque aseguró que lo habían abandonado y tenía miedo de ser secuestrado.

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“Ella es una gran mujer, de mis siete hermanas es con ella la que me llevo mejor, es una mujer humilde, callada, trabajadora, de esas mujeres buenas, así es ella, una mujer que no se mete en chisme ni en problema”, asegura Misael.

Socorro Leiva, madre de ambos, coincide con esas descripciones y añade que a Meylin “le gustaba sembrar flores en su pequeño patio, le gustaba mantener adornada su casita”.

Se fue con tres menores

Misael llegó a Estados Unidos hace cuatro años y era el único que sabía del viaje que emprendería su hermana, cuenta a LA PRENSA. De hecho él fue quien le pagó el viaje para que se fuera junto con Wilton y los hijos gemelos de Misael, de 15 años.

Meylin salió de la casa de su mamá el 8 de febrero junto a Wilton, se fue a reunir con los hijos gemelos de Misael exactamente en el pueblito de Presilla y fue de ahí donde emprendieron el viaje hacia el norte del continente.

“Yo a ella le mandé un dinero para el pasaje y para que comiera y así fue que se vino ella y el niño, y mis hijos que tienen 15 años. Solo ella y yo sabíamos que venía para acá”, sostiene Misael quien afirma que Meylin viajó hasta Guatemala con su cédula de identidad y ya en México planearon el cruce para Estados Unidos.

Cédula de identidad de Meylin Obregón. LA PRENSA / CORTESÍA
Cédula de identidad de Meylin Obregón, la nicaragüense que se encuentra secuestrada en México. LA PRENSA/CORTESÍA

Su madre confirma la versión de Misael y asegura que la noticia del viaje la tomó por sorpresa, al igual que a su marido. “Ella nunca me dijo nada de los Estados Unidos, nunca me dijo ‘mamá me voy’, porque me hubiera puesto más triste, porque sé que son riesgos muy grandes los que toman, aunque ella tenía la idea nunca me dijo. Ella me dijo que se iba para donde su familia en Juigalpa y Nueva Guinea, (donde) tengo una hermana e hija, pero de ahí llamé allá y me dijeron que no estaba, entonces dije: ‘Estás son otras decisiones que ella ha tomado'”, contó la progenitora recientemente.

Los gemelos están en EE. UU.

De acuerdo con las declaraciones de Misael, Meylin junto con Wilton y los gemelos decidieron separarse en el camino. “Al llegar a la frontera, mis hijos y ella con su hijo habían decidido entregarse a Migración de aquí. Mis hijos venían solos, y ella con el niño, es por eso que ellos (sus hijos gemelos) pasaron, porque son menores no acompañados, esos que no vienen ni con la mamá y ni el papá. Aquí son los únicos que están dejando pasar ahorita, porque esas son las leyes ahorita de Estados Unidos”, explicó Misael.

A lo que se refiere Misael es a la política del gobierno de Joe Biden de reunir a los menores que entran a territorio estadounidense con familiares que puedan tener dentro de ese país. Esta situación se ha convertido en uno de los mayores retos de la administración de Biden, ya que en marzo la Patrulla Fronteriza encontró 18,663 niños no acompañados, un número muy por encima de los récords registrados anteriormente.

En el caso de los gemelos, desde el 6 de abril están con Misael en Miami, Florida, después que Migración lo contactó y se los entregó. “No se entregaron juntos a Migración, cada quien por su lado; Migración a mí me localizó para entregarme a mis hijos, pero a Wilton y Meylin los deportan para atrás a México”, asegura.

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Una vez deportados, Meylin intentó junto con Wilton cruzar por segunda vez la frontera sur, sin embargo fueron secuestrados por bandas delincuenciales quienes se contactaron con Misael y le pidieron una recompensa de 10 mil dólares por ambos.

Pagó rescate por el niño

“Ella tenía mi número, ella se los dio a los ‘coyotes’, delincuentes. Yo pagué el rescate normal (del niño) pero no sabía dónde lo iban a dejar, yo pagué cinco mil dólares por el niño. No pude rescatar a mi hermana, por el dinero, dónde lo voy a encontrar, no son 100 córdobas que me piden, me estaban pidiendo por ella cinco mil dólares más”, afirma.

Los dos hermanos estaban conscientes de los riesgos que corría Meylin con los menores al viajar indocumentados al país norteamericano. “Yo le dije a ella (Meylin) pues desde que uno sale de su país prácticamente una canilla (pie) la tiene en la tumba y en el 0tro lado, eso es así, y cuando uno se arriesga a salir de su país sabe que es morir o vivir. Ella sabía, estuvo dispuesta, todos los que huimos de esos países, encomienda su alma y espíritu a Dios porque no sabe si va a vivir o morir”, recuerda Misael.

Según Misael, Wilton ahora se encuentra bien y las autoridades de Migración estadounidenses se lo entregarán a él. “El niño está bien, yo estoy en tramite y me lo van a dar a mí, exactamente no sé (cuándo), es un proceso, pero creo que no pasará de un mes”, asegura.

¿Dónde está Meylin?

Según Misael, a su hermana la tienen “en una bodega, no sé en qué lugar estará exactamente porque ni ella sabe. De vez en cuando me comunico con ella, ella ahí está”.

Asegura que este lunes buscará una abogada en EE. UU. para ver qué pueden hacer en su caso para que lo ayuden a rescatarla y que pueda pasar al país norteamericano. “No importa que no la dejen o la dejen entrar, pero que la rescaten, que ya no siga en manos de esa gente”.

Los malos tratos la llevaron a migrar 

El hermano de Meylin sostiene que los malos tratos psicológicos que ella recibía de su expareja Lázaro Gutiérrez la llevaron a migrar indocumentada a Estados Unidos.

“El motivo (del viaje) de ella era porque el hombre (Lázaro) la maltrataba psicológicamente, él le hacía daño, porque tenía una mujer y otra, y se las llevaba donde la suegra, en todos lados, y hasta la casa. Lo más claro es que ella recibía maltrato psicológicamente, pero también sospechamos que le daba maltrato físico, ella le tenía mucho miedo a él. La trataba feo, era un hombre machista, se hacía lo que él quería, no le importaba los sentimientos de ella, la hizo sufrir bastante. Quizás nunca le pegó, pero hay cosas que duelen más que le den un garrotazo”, refiere.

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“Ella me pidió ayuda para venir, ya no soportaba esa vida con ese hombre, que le vivía dando solo malos tratos y que la había corrido de la casa, y que ella se había ido para donde mi mamá y que ella lo quería dejar para siempre, y que ya era de balde y la había amenazado, de que el día que ella se buscara otro, a los dos los mataría”, dice.

En un reciente viaje que hizo LA PRENSA a la casa de Lázaro Gutiérrez, este confirmó que la decisión de separarse la tomaron juntos porque a Meylin “había cosas que no le gustaban”. “Tal vez yo mucho salía, entonces ella dijo que se iba y se fue”.

El hermano de Meylin agrega que lo que más quiere es que su hermana se pueda reunir con él y con su hijo Wilton. “Para Nicaragua no quiero que vuelva allá, si yo luché para sacarla de ese infierno que vivía es para que se venga para acá”, agrega.

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