Claudio Hernández, el lanzador que siempre está listo para todo en los Dantos, capaz de abrir juego, relevar en medio o cerrar, encontró la grandeza en un caluroso mediodía de domingo en el Estadio Nacional Dennis Martínez, al retirar en orden a los 21 bateadores de León que enfrentó, para bordar el quinto juego perfecto de los últimos 40 años en la historia del beisbol nicaragüense.
Claudio superó 1-0 a Osman Gutiérrez en un duelazo, al no permitir hit ni carrera, sin base por bolas, golpe o error, mientras recetaba cinco ponches. Esta es la obra maestra de este derecho de 28 años de edad, originario de San Francisco Libre, que ocho años atrás llegó de jeans y zapatillas al campo de entrenamiento de los Dantos y una semana después ya estaba inscrito por el equipo.
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“Esto (juego perfecto) es lo más bonito que me ha pasado en el beisbol y se lo dedico a Dios en primer lugar, mi familia y mi esposa que me ha acompañado adonde voy”, dijo Claudio, para quien fue además la primera blanqueada de su carrera.
Como en todo juego de esta naturaleza, además de la perfección del lanzador, también se necesita una defensa impecable y en el cierre del juego Lester Mairena fue fundamental en el campo corto, con par de jugadas de altos quilates.
También aportó mucho el veterano receptor Janior Montes, quien por primera vez estuvo detrás del plato en un perfecto. “Esto es lo que me faltaba. He recibido cinco no hits no runs y ya era hora de un perfecto. Claudio tenía un control total de sus lanzamientos y cada uno de ellos estaba efectivo”, apuntó Janior.
Claudio dominó a un line-up respetable con artilleros del calibre de Enmanuel Meza, Norlando Valle, Marvin Martínez, Arnol Rizo y Oscar Cortez. Meza fue el último out en rola al campo corto. El short Mairera resolvió cinco de los últimos seis outs, un gran trabajo y responsabilidad para un chavalo de 18 años de edad.
De los 21 outs, solamente tres fueron elevados a los jardines, además hubo dos palomones de fouls a la primera base y una línea de Marvin Martínez a manos del propio Claudio, quien hizo abanicar a cinco y provocó 10 roletazos.
Fue el segundo no hit no run de este año, siguiendo los pasos de Santos Jarquín, del Bóer, y el número 77 de los últimos 50 años.
De ese grupo de juegos sin hit ni carrera, solamente hay cinco perfectos, edificados por Emir Darce (1981), Asdrudes Flores (1991), Boanerges Espinoza (2011), José David Rugama (2018) y ahora Claudio. Ninguno es en recorrido de nueve entradas. Los dos primeros fueron de ocho episodios y los últimos tres han sido de siete innings cada uno.
Hernández es un tirador de 24 victorias, 12 derrotas y 22 juegos salvados en su carrera en los Pomares, desde su aterrizaje en los Dantos en 2014, cuando llegó acompañando a unos amigos sin pretensiones de jugar y por eso andaba vestido con ropa deportiva, pero al final fue él quien se quedó con el puesto.
Destacaron
Los Dantos dominaron la serie ante León, que evitó la barrida al imponerse 5-4 en el partido de fondo con jonrón de Héctor Ocón en el triunfo de Fernando Carmona.
Nueva Segovia, Matagalpa y Rivas barrieron en sus series a Madriz, Granada y Costa Caribe, respectivamente. Los jonrones de Ramón Flores, Darwin Valladarez y Christian Marín le permitió remontar 9-8 a Nueva Segovia. Arthur Dawns y Elmer Galeano dieron cuadrangular por Madriz. A segunda hora, se impuso 12-2 Nueva Segovia con otro jonrón de Flores.