El Gobierno de Chile reiteró este martes su preocupación por la situación de Nicaragua, haciendo especial énfasis en las más recientes detenciones de precandidatos presidenciales y opositores del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, cuando se acercan las elecciones generales previstas para el 7 de noviembre próximo.
“El Gobierno de Chile reitera su preocupación frente a los acontecimientos ocurridos en Nicaragua, en especial las últimas detenciones de precandidatos presidenciales y otras figuras connotadas de la oposición, como también de estudiantes en el día de ayer (lunes)”, expresó la Cancillería de ese país a través de un comunicado.
Asimismo, advirtió que el deterioro de la situación de los derechos humanos y las libertades públicas en Nicaragua “constituye un obstáculo a la realización de un proceso electoral acorde a las normas y estándares internacionales”.
A tan solo cuatro meses de los comicios, en los que se eligen al presidente y diputados del país, el régimen de Ortega ha arreciado su persecución política contra los opositores. La cifra de personas detenidas arbitrariamente asciende a 26. En la noche del lunes fueron detenidos el precandidato presidencial y líder campesino Medardo Mairena, y los miembros del Movimiento Campesino, Pedro Mena y Freddy Navas. También fueron capturados los jóvenes opositores Lesther Alemán y Max Jerez.
“Junto con rechazar de un modo enérgico la detención y persecución penal a la que han sido sometidos dirigentes políticos y miembros de la sociedad civil de ese país, Chile insta al Gobierno de Nicaragua a su inmediata liberación y la restitución de sus derechos políticos”, afirma el comunicado de la cancillería chilena.
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Asimismo, la Cancillería recomendó implementar las “reformas necesarias para garantizar el correcto desarrollo del proceso electoral, libre y transparente, previsto para el mes de noviembre próximo”.
Proyectos de resolución a favor del pueblo nicaragüense
Esta no es la primera vez que el Gobierno de Chile y los diputados de ese país rechazan y condenan las recientes prácticas del régimen Ortega Murillo. El jueves, 17 de junio, la Cámara de Diputadas y Diputados de Chile aprobó dos proyectos de resolución que exponían su rechazo a la detención de líderes de la oposición y exigían su inmediata liberación.
El Proyecto de Resolución número 1578 solicitaba al presidente de Chile, Sebastián Piñera, que dispusiera de una serie de medidas entre las cuales se encontraba emitir una declaración internacional rechazando las detenciones de dirigentes opositores realizadas por el Gobierno de Nicaragua.
Al día siguiente, el Gobierno de Piñera se pronunció y condenó “enérgicamente” la persecución política contra los aspirantes presidenciales, partidos políticos, opositores y medios de comunicación independientes.
“El Gobierno de Chile manifiesta su mayor preocupación ante el creciente deterioro del entorno político y democrático en Nicaragua poniendo en riesgo la vigencia del Estado de Derecho y el pleno respeto de los derechos humanos”, aseveró el comunicado emitido el viernes 18 de junio.
El documento también señaló que “Chile ha promovido que esta situación sea abordada en instancias multilaterales, como tuvo lugar en la reciente sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) de fecha 15 de junio pasado, con el fin de garantizar los derechos civiles y políticos, y resguardar la democracia en Nicaragua”.