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Hasta marzo de este año, los activos de la entidad registraron un total de 6,526.29 millones de córdobas. Archivo/LA PRENSA

Retorno de aerolíneas aún no mejora finanzas de empresa que gestiona el Aeropuerto Augusto C. Sandino

La crisis sociopolítica, la pandemia y las medidas restrictivas que impuso el régimen de Ortega a las aerolíneas el año pasado, han provocado una caída significativa en los servicios aeroportuarios, la principal fuente de ingresos de esta entidad.

Pese a que dos aerolíneas hasta junio de este año estaban operando en Nicaragua, la Empresa Administradora de Aeropuertos Internacionales de Nicaragua (EAAI) continuó en el primer trimestre arrojando cifras desalentadoras en sus finanzas, con un mayor déficit, caída en los ingresos, bajo nivel de tráfico de pasajeros y uso de emergencia de sus fondos de reservas.

Hasta el primer trimestre de este año, la entidad registra un déficit de 132.43 millones de córdobas, aunque también refleja una ligera disminución en los niveles de endeudamiento si se compara con el mismo periodo de 2020, señala la Sociedad Calificadora de Riesgo Centroamericana (SCRiesgo) en su más reciente informe, emitido en junio.

“La principal actividad de la compañía se ha visto afectada por dos eventos puntuales, la crisis sociopolítica que enfrenta Nicaragua desde abril de 2018, y la crisis sanitaria actual, derivada del Covid-19, la cual tuvo inicio en marzo de 2020. Ambos acontecimientos deterioraron la situación financiera de la entidad, dada la baja sensible en el flujo de pasajeros”, señala el informe.

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Los activos de la entidad hasta marzo de 2021 registraron un total de 6,526.29 millones de córdobas (unos 186.49 millones de dólares), “los cuales reflejan una disminución del 4 por ciento anual y un ligero incremento de 0.39 por ciento trimestral”, precisó la central de riesgo.

Pasivos y patrimonio de la institución

Por su parte, los pasivos alcanzaron los 2,373.94 millones de córdobas, es decir, unos 67.84 millones de dólares y reflejan una contracción de 19 por ciento anual y de 25 por ciento trimestral, como producto de la cancelación de la deuda que se tenía con la Cooperativa Caja Rural Nacional, R.L. (Caruna), por un monto de 27.55 millones de dólares.

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El reporte revela que los préstamos que adquirió la empresa fueron destinados para mejorar la infraestructura y el servicio en función del aumento en la atención de viajeros. Aunque, también da a conocer que con la actual baja en el flujo de estos pasajeros, es probable que no se adquieran nuevos préstamos puesto que la Administración está concentrada en el pago de los créditos ya vigentes. No obstante, indican que debido a la crisis que enfrentan se tuvieron que adquirir algunos préstamos al cierre del 2020.

Respecto al patrimonio, en el periodo antes mencionado alcanzó los 4,152.35 millones de córdobas (unos 118.66 millones de dólares), un nueve por ciento más si se compara con el mismo lapso de 2020. Entre enero y marzo la contracción de este indicador fue de 25 por ciento con relación al trimestre anterior. Esto “asociado en su mayoría al incremento de la partida de aportes del Estado”, indicó el documento.

Por otro lado, en el último trimestre de 2020 la empresa mejoró su disponibilidad de efectivo gracias a un préstamo que le desembolsó el Banco de la Producción (Banpro), por un monto de siete millones de dólares, lo que en ese entonces provocó que la deuda a largo plazo de la entidad aumentara un siete por ciento en ese año.

Los préstamos que adquirió la empresa fueron destinados para mejorar la infraestructura y el servicio, en función del aumento en la atención de viajeros. Archivo/LA PRENSA

Mayor déficit en flujo de caja

Ahora, en el primer trimestre de este año la empresa generó un déficit de flujo de caja real de 639,000 dólares, a diferencia del superávit reportado en el mismo periodo de 2020 (1.74 millones de dólares).

“Puntualmente, los ingresos de efectivo se incrementan en un 279 por ciento anual, producto del aumento en las transferencias por parte del Ministerio de Hacienda y Crédito Público, aporte que fue utilizado para cancelar la deuda con Caruna. Aunado a lo anterior, en el primer trimestre del 2021, se realizaron el segundo y tercer desembolso del último préstamo con Banpro por 1.10 millones de dólares y 500,000 dólares, respectivamente”, se lee en el documento.

Por su parte, en los primeros tres meses de este año el endeudamiento comercial alcanzó los 1,039.64 millones de córdobas (unos 29.69 millones de dólares), cifra que presenta una disminución del 35 por ciento de forma anual y significa un 44 por ciento del pasivo total. La razón por la que estos porcentajes se contraen es debido al pago de la deuda con Caruna, “no obstante, continúa considerándose alto”, enfatizó el reporte.

Ingresos se ven afectados por caída en flujo de pasajeros

La crisis sociopolítica, la pandemia y las medidas restrictivas que impuso el régimen de Ortega a las aerolíneas el año pasado, han provocado una caída significativa en los servicios aeroportuarios, la principal fuente de ingresos de la entidad, deteriorando de esta manera su situación financiera.

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En términos generales, los ingresos de EAAI se componen en un 76 por ciento por los servicios aeroportuarios, seguido de los servicios auxiliares y los ingresos financieros con 12 por ciento cada uno.

Pero, la EAAI se ha estado ahogando financieramente al tener más gastos que ingresos, un comportamiento que se puede constatar desde 2019, porque en 2018 no se divulgaron estos datos y en 2017 cerró con un superávit de 144.02 millones de córdobas.

En concreto, en 2020 esta empresa obtuvo ingresos totales acumulados por una suma de 488.49 millones de córdobas, mientras que en el 2019 los ingresos totalizaron 1,052.58 millones de córdobas, lo que implica que hubo una reducción del 53.5 por ciento. Esta disminución de ingresos estuvo asociada a una caída del 57 por ciento de los ingresos aeroportuarios.

En el caso de los gastos acumulados, en el 2020 estos sumaron 1,008.86 millones de córdobas, inferior a los 1,271.02 millones de córdobas que se generó en gasto en el 2019, es decir que disminuyó un veinte por ciento.

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Gastos mayores que ingresos en 2021

Asimismo, en el primer trimestre de 2021, la compañía obtuvo ingresos por un monto de 111.06 millones de córdobas, pero sus gastos totalizaron 243.49 millones de córdobas, lo que generó un déficit de 132.43 millones.

Cabe recalcar que los costos y gastos de EAAI se componen por los gastos financieros (37 por ciento), costos de servicios aeroportuarios (31 por ciento), gastos administrativos (15 por ciento) y la depreciación (13 por ciento).

“A excepción del Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, las demás terminales significan un centro de costo para la operación de EAAI, ya que aún no se ha consolidado un flujo suficiente de tránsito aéreo que lleve a punto de equilibrio la operación de los distintos aeródromos”, enfatizó la calificadora de riesgo.

Asimismo, dieron a conocer que la Administración decidió usar las emisiones de cheques de Gerencia, los cuales se mantenían como reservas estratégicas ante cualquier emergencia, a raíz de la crisis sanitaria y sus efectos directos sobre los ingresos de la empresa.

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“Con relación a la actividad aeroportuaria, referente a las entradas y salidas de pasajeros internacionales del Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino, principal plaza de EAAI, es importante destacar que el aeropuerto presenta estacionalidades en el comportamiento del flujo de pasajeros, en donde los períodos de diciembre a marzo y de julio a septiembre son los de la mayor entrada y salida de pasajeros internacionales, y por ende, el mayor movimiento a nivel de ingresos”, detalla el informe.

Drástica caída en flujo de viajeros

En concreto, a marzo de este año el flujo acumulado de viajeros que entraron o salieron por el Aeropuerto Internacional de Managua es de 55,716 pasajeros, lo que se traduce como una disminución equivalente al 79 por ciento si se compara con el mismo periodo de 2020. Esto como consecuencia de la crisis sanitaria por Covid-19.

“Al observar el movimiento de la tasa de variación anual en el número de pasajeros internacionales de forma mensual, EAAI registra una caída significativa en el tránsito de pasajeros internacionales a partir de abril de 2020 y registra, al corte de análisis, una reducción del 68 por ciento”, puntualizó el informe.

El documento también expresa que “la afectación directa al sector turismo, dada la crisis política social que inició en abril 2018 en Nicaragua, sumado a la crisis sanitaria mundial producto del Covid-19, impacta de forma sensible la generación de ingresos de la entidad y su situación financiera en general, pese a los esfuerzos realizados por la Administración para mitigar los impactos negativos”.

A marzo de este año el flujo acumulado de viajeros que entraron o salieron por el Aeropuerto Internacional de Managua es de 55,716 pasajeros. Imagen referencial. Archivo/LA PRENSA

Por ejemplo, en todo el 2020 el flujo acumulado de entradas y salidas de pasajeros internacionales por el Aeropuerto Augusto C. Sandino fue de 314,351 pasajeros, lo cual significó una reducción del 68 por ciento con respecto a los 993,818 pasajeros que entraron en el 2019.

Para el cierre de este año, la entidad proyecta que habrá un incremento paulatino en el flujo de viajeros internacionales, debido a la reactivación de algunas de las aerolíneas comerciales y de carga, así como por el incremento de vuelos chárter privados.

La entidad pone sus esperanzas en que se incrementarán las frecuencias de vuelos con Copa, Avianca y Aeroméxico, lo que provocaría una mayor afluencia de viajeros. De hecho, a partir de este 1 de julio, ya comenzó a operar la aerolínea mexicana, luego de más de un año de haberse retirado del país a raíz del cierre de espacios aéreos en varios destinos de conexión como medida para reducir la expansión del Covid-19.

Ante este hecho, el sector turismo comentó anteriormente a LA PRENSA que el retorno de Aeroméxico podría estimular el retorno de las aerolíneas American Airlines, United Airlines y Spirit, las cuales se rehúsan a someterse a las exigencias del régimen de Ortega. Sin embargo, el pasado viernes se conoció que American optó por retrasar su retorno hasta noviembre próximo, mientras que se espera que United, que tiene programado volver en octubre, también retrase su fecha última. Spirit sigue sin dar fecha.

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Entre los protocolos de bioseguridad adoptados por el Gobierno destacan: enviar lista de sus pasajeros con resultado negativo de las pruebas de PCR a las autoridades de Aeronáutica Civil y al Ministerio de Salud (Minsa). Otra de las exigencias del Gobierno es que las compañías de vuelos envíen información sobre el tipo de aeronave que usan para traer a la tripulación, una exigencia que solo se suele aplicar a los viajes chárter.

El Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino retomó operaciones desde mediados de julio del año pasado, pero este ha tenido serias dificultades para que dichas líneas aéreas retornen a territorio nacional. Actualmente, en Nicaragua solo están funcionando Avianca, que inició operaciones en septiembre del año pasado; Copa, que empezó en enero del corriente; y Aeroméxico, que se sumó este mes.

Postergaciones también afectan al sector turismo

Estas aerolíneas estadounidenses son claves para reactivar el turismo nicaragüense, puesto que los pasajeros provenientes de Norteamérica tienen un alto poder adquisitivo y este ha mejorado luego que el Gobierno de Estados Unidos, por ejemplo, impulsara masivos programas de estímulos, que contemplaban poner dinero en manos de las familias estadounidenses que planean viajar al exterior.

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Carlos Schütze, presidente de la Asociación Nicaragüense de Agencias de Viajes y Turismo (Anavyt) y vicepresidente de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), explicó recientemente a LA PRENSA que es difícil que estas compañías cedan si se mantienen las actuales condiciones en el país.

“Creo que lo que nos está afectando son los requerimientos de operación, ya que las líneas aéreas de Estados Unidos no le pueden exigir a los pilotos que estén haciéndose las pruebas Covid-19 constantemente y lo otro es que no sabemos si están dispuestos a manejar las pruebas y el listado (de pasajeros) 72 horas antes, porque hay compras de última hora que para las aerolíneas son importantes, esas pueden ser las causas”, dijo en su momento.

Además mencionó que la postergación de las aerolíneas ha tenido mucho peso sobre el sector. “Siempre que no entra una de las líneas que estaba programada estamos perdiendo (ingresos económicos y pasajeros), esta postergación nos quita volumen por un lado, pero por suerte Avianca incrementó a dos vuelos diarios y viene a llenar el vacío que deja American Airlines; United estaba con dos vuelos a la semana, no es un gran volumen”, enfatizó.

En tanto, el presidente de la Cámara Nicaragüense de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa Turística (Cantur), Leonardo Torres, también había comentado a LA PRENSA que considera que esta situación desalienta y afecta de gran manera al sector turismo.

Las aerolíneas estadounidenses son claves para reactivar el turismo nicaragüense. Imagen referencial. Archivo/LA PRENSA

“En la última reunión con Cantur, que monitoreamos todas las actividades, vimos mucho pesimismo para este 2021. En el 2020 no llegamos ni a los 200 millones de dólares y este año inicialmente esperamos unos 340 millones, pero ahora pensamos que vamos a andar en 185 millones y en el mejor de los casos podemos cerrar igual que el año pasado”, aseguró.

Para el presidente de Cantur, la crisis del sector se agudiza por la suma de muchos factores. “Tenés el tema de conectividad con las líneas aéreas norteamericanas, que tal vez nos está afectando más de lo que nosotros pensamos. No sé si las alertas de Estados Unidos nos están haciendo daño”, agregó.

Asimismo, indicó que la imagen que tiene el país en el exterior juega un papel muy importante, así como “el rebrote de la pandemia, ahora que Pfizer planteó una tercera dosis para inmunizarse de la variante delta, algunos países están volviendo a cerrarse y todo eso suma”.

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