Empezaremos destacando que la palabra tiste según los estudiosos, proviene del Náhuatl “Textli” que significa cosa molida. Hablar del tiste es hablar de dos granos propios del continente americano y que son parte de la esencia del sabor que nos caracteriza.
Hemos de recordar que del maíz surgen un sinfín de recetas entre platos fuertes, ensaladas, dulces, sopas, tamales y bebidas. El cacao, por su parte, fue moneda precolombina y en las Crónicas de Indias se menciona en una bebida caliente, amarga y picante que acostumbraban tomar nuestros antepasados.
En esta vorágine de transculturación de refrescos envasados, empezamos a notar que muchas bebibas tradicionales, empiezan a estar en peligro de extinción, por ejemplo el pinol, aunque todos digamos que somos pinoleros, la verdad es que ya muy pocos toman el pinol o en menor grado de peligro el pinolillo. Quizás el tiste subsiste con mayor presencia por ser el acompañante por excelencia del quesillo, una de las recetas más importantes de nuestra gastronomía y que aún goza de un alto consumo por ser una propuesta de comida rápida con buen sabor, saciadora y a un costo accesible.
Es importante destacar que existen dos versiones del tiste, la primera es la mezcla del maíz con el cacao y la segunda, es a base de tortillas sobrantes del día anterior molidas con el cacao. En ambos casos se le agrega especias como canela, clavo de olor y pimienta dulce. En épocas pasadas le agregaban un toque de achiote.
Y ahora sí, a la receta: “Te fuiste tiste”.
Tiste
Ingredientes:
1 libra de maíz blanco seco
½ libra de cacao
10 clavos de olor
25 granos de pimienta dulce
canela en rajas al gusto
Para la masa:
3 ½ tazas de agua
el molido
Agua y azúcar para la bebida
A fuego medio en un comal o paila tueste el maíz, removiendo de vez en cuando por aproximadamente 10 a 12 minutos hasta que dore parejamente. Coloque en una superficie seca y limpia y deje enfriar completamente.
A fuego moderado, en un comal o paila tueste el cacao removiendo de vez en cuando por unos ocho minutos o hasta que el grano empiece a saltar y se observe un óvalo negro en el centro de la cáscara. Pase a una superficie seca y limpia y deje enfriar complemente. Coloque un grano de cacao sobre los dedos índice y medio y ejerza una ligera presión con el dedo pulgar para descascarar y haga lo mismo con el resto del cacao.
Mezcle el maíz con el cacao y agregue las especias. Muela fino.
A la harina resultante agregue las 3 ½ tazas de agua y amase bien. Forme cilindros de 4 pulgadas de largo por dos pulgadas de diámetro y deje reposar 10 minutos mínimo. Luego bata en agua con azúcar al gusto. Sirva con hielo.