Edgard Montiel, probablemente el bateador de mayor jerarquía en el Bóer desde la salida de Nemesio Porras, volverá a los Indios en la Liga de Beisbol Profesional, luego de completarse una transacción que lo extrae de los Tigres y lo envía a la tropa capitalina, a cambio del experimentado relevista derecho Wilber Bucardo.
A través de un comunicado, la Liga Profesional, cuya próxima edición despega el 4 de noviembre venidero confirma el cambio y establece que estos jugadores pertenecen a las nuevas franquicias por un período mínimo de dos años, el que perfectamente podría renovarse de común acuerdo entre pelotero y equipo.
Aunque Montiel es de Managua y pertenece al Bóer en el Pomares, ha jugado para los Tigres de Chinandega desde el 2013 en el beisbol profesional. En un principio, la tribu no le dio oportunidades y luego los chinandeganos lo amarraron al club por su buen desempeño. Volvió al Bóer en 2015, pero desde 2016 retornó a los felinos.
A pesar de que en 2017 bateó .349 con los Tigres y en 2018 resumió .316, su mejor temporada fue en 2020, cuando acumuló .387, con siete jonrones y 26 impulsadas en 93 turnos. Debe ser sin duda una valiosa pieza para los Indios, quienes han tenido dificultades para estructurar equipos competitivos en los últimos años de la Liga Profesional.
Bucardo es un veterano tirador derecho que se ha especializado en los relevos. Fue firmado por los Gigantes de San Francisco y debutó en la liga rentada pinolera en 2006 con el Bóer, antes de pasar por los Leones, Gigantes y Tigres, con quienes jugó incluso en 2020, antes de ser tomado por el Bóer en el más reciente sorteo.
En 2017 y 2018, Bucardo tuvo sus mejores desempeños, unido precisamente al Chinandega. En 2017 acumuló marca de 2-0 y 1.27 con 11 juegos salvados. Al año siguiente tuvo 2-1 y 0.87 con 10 rescates, No obstante, su año de más victorias fue en 2006, cuando cerró con 5-2 y 1.71, militando con el Bóer.
Ahora regresa a los Tigres donde debe jugar un papel clave en el cuerpo de relevistas que tendrá a mano el mánager Lenín Picota para la temporada venidera. Es una buena transacción porque permite al Bóer disponer de un jugador del nivel de Montiel, quien además de producir, da también un sentido de identidad al equipo.