El poeta era solitario y huraño. Entre sus pocos amigos siempre había gatos que eran como él y que, como él dijo, le daban compañía sin quitarle soledad. (Foto cortesía de Oscar Cantarero).
(Foto cortesía de Oscar Cantarero).
El poeta era solitario y huraño. Entre sus pocos amigos siempre había gatos que eran como él y que, como él dijo, le daban compañía sin quitarle soledad. (Foto cortesía de Oscar Cantarero).