1916. Los honores al Príncipe de las Letras Castellanas duraron seis días. El cadáver de Rubén Darío fue despedido por multitudes en una ceremonia en la que la guardia de honor le dio un toque de respeto al hombre que con su pluma le dio fama a Nicaragua. MAGAZINE/LA PRENSA/CORTESÍA/ MUSEO ARCHIVO RUBÉN DARÍO
Rubén Darío
1916. Los honores al Príncipe de las Letras Castellanas duraron seis días. El cadáver de Rubén Darío fue despedido por multitudes en una ceremonia en la que la guardia de honor le dio un toque de respeto al hombre que con su pluma le dio fama a Nicaragua.
MAGAZINE/LA PRENSA/CORTESÍA/ MUSEO ARCHIVO RUBÉN DARÍO