Con espíritu de lucha, los miembros de la Unidad del Adulto Mayor de Nicaragua realizarán una marcha hoy miércoles, en demanda del pago de una pensión reducida de parte del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS).
“Tenemos derechos adquiridos. Es una arbitrariedad, una ilegalidad y una estafa en contra de los adultos mayores que no se nos entregue la pensión reducida a la que tenemos derecho y que está respaldada en la misma Ley de Seguridad Social”, calificó Federico Kraudy, directivo de la Unidad del Adulto Mayor de Nicaragua (UNAM).
Kraudy, al igual que los demás directivos de la UNAM, demandan la pensión reducida amparados en el artículo 40 de la Ley de Seguridad Social, el cual establece que “podrán concederse pensiones reducidas, no menores del 40 por ciento del salario prescrito, para aquellos casos en que habiendo el asegurado cumplido la edad de retiro, no haya cumplido el período de calificación (750 semanas de cotizaciones), siempre que acredite como mínimo absoluto cinco años de pagos de cotizaciones”.
La marcha, que se une a las diferentes actividades de demanda que han protagonizado los adultos mayores en los últimos años, saldrá hoy a las 8:00 a.m. de la Estatua de Montoya, en Managua, y se dirigirá hacia las instalaciones de la Secretaría del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) y residencia del presidente Daniel Ortega, que funciona como su despacho.
La entrega de las pensiones reducidas fue suspendida desde 1994, y desde entonces los adultos mayores han insistido por su derecho sin que se les dé respuesta alguna.
“No quieren entregarnos el dinero que depositamos por varios años en el INSS. Es una estafa”, insistió Kraudy.
Los jubilados que requieren de una pensión reducida aún no han sido atendidos por el Gobierno, aunque hace varios meses se reunieron con el presidente ejecutivo del INSS, Roberto López, “sin que nos diera una verdadera respuesta a nuestra demanda”, dijo Orlando Téllez, otro de los demandantes.
A nivel nacional se calcula que son unos 25 mil adultos mayores quienes requieren de una pensión reducida. No obstante, las cifras que el INSS maneja de los adultos mayores en la misma situación supera los 100 mil.
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