Conducta
“Hay hombres cuya conducta es una mentira continua”.
Barón de Holbach (1723-1789), filósofo francés.
POPULISMO ORTEGUISTA
Es lamentable que en Nicaragua, siendo el segundo país más pobre de Centroamérica y el Caribe, tengamos todavía otro día más feriado nacional por celebrarse el Día de las Madres nicaragüenses. La ocasión es buena, pero si realmente el señor populista de Daniel Ortega quiere apoyar a las madres nicaragüenses debería aumentarles el salario a cada una de las mujeres que trabajan en los diferentes instituciones del Estado como el Minsa y el Mined.
En esos sectpres las mujeres profesionales de la salud y del magisterio, han solicitado se les aumente el salario, pues el actual no alcanza ni para la canasta básica que asciende por los ocho mil córdobas. Pero lo único que recibieron de don “populista” Ortega fue el famoso Bono Solidario. Si tanto se preocupa por los pobres, ¿por qué no les hace ese aumento esperado con mucho anhelo por las madres trabajadoras del Estado?
Lo más lamentable del famoso decreto otorgando día feriado nacional, es que muchos niños que se presentaron a los centros de salud y hospitales con enfermedades varias no fueron atendidos en su totalidad o recibieron mala atención, porque las puertas se encontraban cerradas y no por un desastre natural, sino porque los trabajadores de la salud no se presentaron a trabajar por estar de vacaciones.
Ortega está jugando con la pobreza y el hambre de los más necesitados, y utilizando el Estado para su beneficio personal haciendo cosas ilegales para buscar su reelección, pasando por encima de la leyes de la República, tratando de mantener a los trabajadores del Estado como potables aliados para sus fines personales, “mantenerse en el poder para seguirse enriqueciendo y la población seguirse empobreciendo”…
Ezequiel Pérez
“SÚPER EGO” EN PARTIDOS
Ciudad de México (AIPE)— Una de las causas por las que los partidos políticos pierden elecciones son las divisiones internas. Algunos de sus miembros al no ser designados candidatos se convierten en enemigos del partido en el que militan y terminan al servicio de partidos opositores.
Algunos miembros son los principales defensores del partido mientras ostentan un alto puesto, pero cuando son desplazados o no son designados candidatos olvidan sus principios éticos y consideran que sin su presencia el partido no sirve y “hay que empezar de nuevo”.
Esos personajes, consciente o inconscientemente son utilizados y hasta financiados por otros partidos para profundizar divisiones y sembrar cizaña.
No es inmoral cambiar de partido, pero denota tener pocos principios atacar al partido que se abandona sólo porque ya no se es directivo. Si no comparto las políticas de los dirigentes de mi partido se vale renunciar y expresar mi desacuerdo, pero no convertirme en furibundo crítico de la institución a la que pertenecí y sabotear a sus candidatos sólo porque ya no soy dirigente ni candidato.
El poder, como el dinero, es adictivo y en muchas ocasiones nos hace olvidar principios y lealtades porque nuestro ego se convierte en un “súper ego”, que nos lleva a patear y a tratar de destruir la institución que nos dio reconocimiento.
Ese “súper ego”, que se desarrolla en los ególatras, los lleva a debilitar a las instituciones donde se formaron. Sólo quienes guardan rencores y odio en su corazón, y tienen un ego más grande que su intelecto, se convierten en enemigos de las instituciones, llámense partido, empresa o iglesia, a la cual deben su formación política, empresarial o espiritual.
Luis Pazos
Profesor mexicano de economía política.
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CONTRAVENENO
El presidente Daniel Ortega, creyéndose dueño y señor de esta ínsula, como en efecto lo está intentando a base de decretazos, propuso hace poco en una reunión con los nobles (empresarios) —como diría Maquiavelo— una audaz y osada jugada de compartir con ellos el Gobierno y borrar de un solo machetazo al parlamento.
Si eso lo propone en Honduras le sacan tarjeta roja y lo expulsan del partido, como le pasó a Manuel “Mel” Zelaya.
Doña Miriam Argüello, diputada de la República, dice que ese chamarrazo se los lanza maquiavélicamente Ortega a los empresarios, siguiendo los principios del ilustre escritor italiano del siglo XV. Él decía: para que un Príncipe (Presidente) sea querido tiene que estar bien con las Fuerzas Armadas y la Policía. ¡Ni que dudarlo! también tiene que estar bien, con los siervos (Pueblo Presidente), un ejemplo es el Bono y bien con los Nobles (empresarios).
El presidente Ortega queriéndoles echar maíz al pico a los empresarios les propone borrar al Congreso, abriéndoles el apetito para que compartan el Gobierno.
La respuesta de los empresarios quedó gravada en el disco duro de Daniel, como dice la diputada Argüello. Algunos se carcajearon, otros más cautos se sonrieron, hubo alguna que otra cara seria, si vio en algunos que los ojos se le desorbitaban, éstos quedarán grabados y sabrá con cuántos cuenta en esta aventura, si es que los hubo.
Hay un dicho muy cierto que dice: Lo que es igual no es tirano. En ese mismo escenario debieron hacerle una contrapropuesta: quedemos mejor gobernando con el Congreso, que fue electo por el pueblo y es como manda la Constitución y borrar la figura del Presidente.
Para todo veneno hay un contraveneno. Para los orteguistas ¡la democracia!, diría Pedro Joaquín Chamorro Cardenal.
Enrique Padilla Santos
LLAMADO ECLESIAL
Con mucho regocijo democrático y simpatía por quien lo dijo y lo que representa en el mundo católico nicaragüense, como lo es nuestro apreciado monseñor Brenes, Arzobispo de Managua, en su llamado formulado con sinceridad y amor de patria al presidente Daniel Ortega, para que éste desista de sus pretensiones reeleccionarias en estos momentos en que es visible el manifiesto interés de él y un grupo de seguidores que han estado en doloroso y penoso manoseo a nuestra Constitución para buscar a toda costa la reelección de Ortega para las elecciones presidenciales del 2011.
Este llamado del arzobispo Brenes debe tener de parte del presidente Ortega una respuesta de altura y de tal dignidad aceptando como valedero y muy oportuno el citado llamado que le traería a Ortega aplausos y marcado como “bello gesto”, lo que debe estimarse como un acto que sería un paso gigante y un capítulo bien escrito de fortalecimiento para la reconciliación definitiva con la paz, amor y trabajo para todas las familias nicaragüenses.
Recientemente fue objeto de favorables comentarios la Pastoral de la Conferencia Episcopal de la Iglesia católica en la que se pide a las autoridades del Estado total respeto a la Constitución Política de Nicaragua y que se procure “un diálogo sincero, donde se deje a un lado los intereses políticos”.
Lamentablemente, la anarquía está en Nicaragua y vino acompañada del espíritu redivivo del despreciable Judas Iscariote. Y para más vergüenza, esta anarquía hizo como propias las palabras que dijo César cuando anunció al senado la rapidez de la victoria que acababa de conseguir cerca de Zela contra Farnaces; y tales palabras fueron: Veni-vidi-vici y Nicaragua está salpicada de sucias jugadas en que se destacan catedráticos universitarios en flagrante ultraje a la legislación nacional.
Se realizan con dolo y malicia interpretaciones de caprichos para burla siniestra de las sabias reglas de la hermenéutica así desfilan como sabemos, lo resuelto por la sala constitucional de la Corte Suprema el 19 de octubre del año pasado 2009, cuando de un plumazo olímpicamente los catedráticos magistrados cercenaron el artículo 147 de nuestra Constitución y que con eso cabe la reelección presidencial y en fila y sin pena alguno surgió el llamado “ decretazo” del 9 de enero del año en curso sin ningún fundamento ni sostén alguno de legalidad.
Luego vinieron otras abusivas decisiones que no merecen comentarios. Y, Judas por su parte y sin perder tiempo como dijimos bien redivivo ha hecho sus aposentos en la Asamblea Nacional y de remate ha encontrado diez o doce diputados que se sienten estimulados para la venta a buen precio de sus conciencias. Dios los perdone ¡Así sea!
Alfonso Dávila Barboza
Ver en la versión impresa las páginas: 10 A
