Por Sergio León y Judith Flores
BLUEFIELDS Y MIAMI
“Me quitaron a mi chiquita, era una niña preciosa, esto es desesperante porque no sé qué pasó, cómo ocurrió, la Policía no me ha informado nada, solo han dicho que están investigando, todo esto es muy extraño, hasta hoy -miércoles— al mediodía, tres días después de la muerte, me confirmaron que se trata del cuerpo de mi hija, aunque yo sabía que se trataba de ella”, dijo entre sollozos Audrey Hansack, madre de Ashley Chow, la adolescente de 15 años asesinada junto Harlen Quiroz Peralta (22) e Israel Rincón, de 32 años, originario de República Dominicana y novio de Quiroz.
El hecho se registró en la residencia propiedad de Audrey Hansack, sitio donde se le alquilaba un apartamento a Harlen Quiroz, ubicada en la 480 North West y la 134 Calle, en la ciudad de North Miami.
Hansack aclaró que ella le rentaba una habitación anexa a Quiroz, a quien quería como si fuese su hija, “él (Israel Rincón) era su novio, pero no residía en la casa”.
Hansack informó que el cuerpo de su hija fue encontrado en un baño de la residencia junto al de Quiroz, mientras que el cuerpo de Rincón fue localizado ensangrentado sobre una cama.
La Policía tipificó el caso como homicidio y aclaró que las tres personas murieron a causa de disparos de bala, pero aun no aclaran el móvil del crimen ni el tipo de arma que se usó, tampoco cuantas personas participaron en el crimen que conmueve a la comunidad de Miami, Estados Unidos y Bluefields, Nicaragua.
“No me han dicho nada, desconozco qué sucedió, mi hija era una buena niña y con muchos sueños, no encuentro respuestas todavía”, expresó la madre de la menor.
Ashley era una alumna destacada del Miami High School, al momento de su muerte se desempeñaba como presidenta estudiantil en su aula, pertenecía a la organización Líderes de Negocios del Futuro de América, (FBIA, por sus siglas en inglés) y era miembro del equipo de softbol femenino nicaragüense. Quiroz también pertenecía al equipo deportivo.
SE QUEDÓ EN MIAMI
Ashley era la segunda de cuatro hermanos, pero la única hija mujer de Hansack, que se encontraba en Nicaragua —donde acostumbra a pasar las vacaciones de Navidad— cuando le notificaron de la tragedia.
“Este año fue el único que mi hija no viajó conmigo a pasar la Navidad con la familia en Nicaragua, ella quería asistir a los 15 años de una de sus mejores amigas, además este año los pasajes estaban demasiados caros y me dijo que se iba a quedar (en Miami) para que yo no gastara tanto dinero”, declaró Hansack.
El hallazgo del crimen lo hizo una de las amigas de Harlen, que desde tempranas horas del día 2 de enero la estuvo llamando para asistir a la Iglesia, “a ella le resultó extraño que Harlen no le contestara el teléfono, más cuando se trataba de ir a la Iglesia, ella decidió ir a la casa a buscarla y vio que había sangre, entonces llamó a la Policía”, relató un familiar de la jovencita de 15 años.
La familia Hansack ha decidido repatriar los cuerpos de las dos jóvenes a Nicaragua el próximo martes y están solicitando el apoyo de la comunidad para poder trasladarlos desde Miami-Managua, de ahí hacia Bluefields.
Las donaciones pueden hacerse a la cuenta número 898045728203, en el Bank of America. La cuenta fue abierta temporalmente para recaudar fondos para el traslado de las víctimas.
“Le queremos pedir a las autoridades de Miami que encuentren a las personas que cometieron el crimen, Harlen era una mucha muy bonita, simpática, bien amorosa, se llevaba bien con todos, todos la querían, estuvo conmigo en mayo, no sabemos qué pudo haber pasado, todo estaba bien en la casa”, dijo Maybelline Peralta, tía de Harlen.
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