Por Greg Johns / MLB.com
PEORIA, Arizona
En un campo de entrenamiento de los Marineros, donde la sombra amenazante de lanzadores prospectos jóvenes como Danny Hultzen, James Paxton y Taijuan Walker ocupa un lugar preponderante, un hombre pequeño con una gran sonrisa está volando en silencio bajo el radar.
Erasmo Ramírez, un lanzador derecho de 21 años, originario de Nicaragua, es veces mencionado junto con los chicos jóvenes, pero casi siempre después que el trío de escogidos en el draft, todos los cuales se encuentran entre los 100 mejores prospectos de las Grandes Ligas para el año 2012.
Ramírez es de 5'10 pies, unos seis centímetros más bajo que los Tres Grandes. Él no fue seleccionado en un sorteo, habiendo sido firmado como agente libre internacional por los Marineros en el 2007, como un joven de 17 años de edad.
Pero después de haber crecido rápidamente a través del sistema de Ligas Menores, el joven sin duda pertenece a ese selecto grupo de lanzadores que representan la luz brillante para el futuro del club.
“Sin duda”, dijo el coach de pitcheo de los Marineros Carl Willis en el inicio del campamento.
“Lo vi en Clase A baja cuando vine por primera vez como coordinador. Él es más que un tirador de strikes. Es engañoso debido a su tamaño, pero consigue gran velocidad. Se crea ciertos ángulos. Tiene buena habilidad para manejar lanzamientos secundarios a pesar de ser tan joven.
“Creo que va a ser una sorpresa”, agregó Willis. “A pesar de que la gente ha escrito, leído y escuchado cosas maravillosas acerca de él, creo que hay gente aquí -incluyendo tal vez al manager Eric [Wedge] -que no lo ha visto físicamente y van a pensar que él quizá no encaja, pero luego lo ves y te sorprendes. Él tiene la oportunidad de tener un buen año”.
Wedge ha observado ahora, dos sesiones de bullpen de Ramírez en la primera semana del campamento y de hecho le gusta lo que ha visto.
“Impresionante”, dijo Wedge. “Me gusta la forma en que se mantiene al soltar sus pitcheos. La pelota sale realmente bien de su mano. Tiene buen material. Y se puede decir que habrá competitividad. Es un hombre joven que ha llegado realmente largo y de forma rápida. Estoy emocionado de verlo. No lo había visto antes, pero es alguien que me alegra que esté en el campo, porque además en muy correcto en su relación con todo mundo”.
Eso es música para los oídos de Ramírez, quien tuvo 7-6 con efectividad de 4.73 en 19 aperturas con Doble-A con los Generales de Jackson y luego 3-2 con 5.10 en siete aperturas en Triple-A con el Tacoma, todos eso a sus 21 años. Lo más impresionante fue su relación ponche-bases por bolas, 116 a 41 en 152 innings.
Ramírez es varios años más joven que Hultzen o Paxton, quienes tomaron la ruta de la universidad para llegar al beisbol, pero tiene más experiencia en ligas menores y más tiempo en el beisbol profesional. Así que sin duda es la mezcla cuando se trata de jóvenes del equipo que buscarán ser promovidos en algún momento la próxima temporada.
“Estoy muy emocionado”, dijo Ramírez. “Esta es la oportunidad de todo el mundo quiere. Intentado encontrar un lugar en la rotación de Seattle, pero sé que hay una gran cantidad de chicos aquí. Nunca sabes qué va a pasar, pero lo único que puedo decir es que voy a seguir trabajando. El gerente general, el manager y todo el mundo va a tomar una decisión y decir quién se va a quedar o no, así que mi única preocupación es solo aprovechar todas las oportunidades que me dan”.
Ramírez lanza una bola rápida en la parte baja de las 90 millas (91-92) con un buen control y lo respalda con un cambio sólido y curva. Está añadiendo una recta cortada a la mezcla, consciente que un cuarto pitcheo puede ayudarlo.
Y aunque que luce pequeño ante la imponente figura de 6'4 pies de sus compañeros Paxton y Walker, o los 6'3 pies de Hultzen, Erasmo tiene presencia en el montículo.
“Sé que soy más pequeño que los otros muchachos, pero siempre trato de seguir trabajando en mi hombro y el codo para mantener cada vez más fuerte”, explica. “Yo no digo, 'bueno, voy a tirar a 95, voy a tirar 96 millas por hora'. Yo digo, 'Hoy me voy a trabajar en mi comando. “Si lanzo a los lugares correctos, voy a sacar outs de esa manera”.
Ramírez probó eso al quedar con 2-1 y una efectividad de 1.48 en seis aperturas en la liga invernal de Venezuela, con 20 ponches y solo una base 30.1entradas. Ese es el tipo de cosas que trae una sonrisa a los rostros de los Marineros, que coincide con la apariencia constante proveniente de Ramírez.
Nadie en el campamento de los Marineros parece estar disfrutando más de Ramírez.
“Hay que divertirse y disfrutar el beisbol”, dice. “Tu vas a tener días en los que te sientes triste, enojado, quieres matar a alguien porque cometió un error o tú hiciste uno, y entonces quieres matarte a ti mismo. Pero ese día solo te hace más fuerte. Si usted va a lanzar en los niveles altos, lo que tienes que aprender a controlar esa emoción”.
“El año pasado, tuve la peor experiencia de mi vida, cuatro entradas en dos juegos, con 11 carreras permitidas (con el Jackson en Doble A). Me sentí como, bueno, el beisbol no está funcionando para mí. Sin embargo, el día siguiente volví al campo y dije: 'OK, me patearon el trasero. Así que voy a trabajar más duro que antes, y ver si el próximo juego será lo mismo. Y ahora me siento muy bien. “
¿Y qué hay de poder hacer el grado para las Grandes Ligas?
“Bueno, ese es mi sueño desde que firmé y fui Venezuela (en 2008)”, dijo. “Tuve que salir de allí y venir a EE.UU. y mostrar a todos lo que puedo hacer. Ahora tengo la oportunidad y voy a trabajar duro y hacerle una decisión difícil para todos.
“Para mí, la buena noticia es que si quieren un abridor, un relevista, me gustan ambos roles. Lo que ellos quieran. La cosa es la oportunidad. Estoy buscando una oportunidad”.
(Traducción de Edgard Rodríguez)
