MIAMI/AFP
El agente cubano condenado por espionaje en Estados Unidos, René González, fue autorizado el lunes a viajar a Cuba por dos semanas para visitar a su hermano enfermo de cáncer, mientras el contratista estadounidense Alan Gross, preso en Cuba, busca obtener un permiso similar.
La juez federal de la corte de Miami, Joan Lenard, otorgó el permiso condicionado a González una semana después de que el Departamento de Justicia se opusiera por temor a que recibiera nuevas instrucciones de espionaje en La Habana.
Diversos grupos del exilio cubano de Miami se mostraron ayer divididos sobre la decisión de la juez.
Janisset Rivero-Gutiérrez, secretaria nacional de Directorio Democrático Cubano, expresó que “esta no es la forma de tratar con la mafia castrista, que en vísperas de la visita del papa Benedicto XVI, el gobierno de Raúl Castro trata de legitimarse con propaganda y esta decisión alimentará esa propaganda en la isla donde será vista como una victoria del régimen”.
ross, que cumple 15 años de cárcel en Cuba, pidiera al presidente Raúl Castro un permiso de dos semanas para que pueda visitar a su madre en EE. UU., quien a sus 90 años sufre de cáncer en los pulmones.
El régimen cubano acusa a Gross de ser un espía y de alentar la desestabilización política.