Por Elízabeth Romero
“La confesión” de parte de la directora de facto de la Policía Nacional, primera comisionada Aminta Granera, es a criterio del expresidente de la Asamblea Nacional, Cairo Manuel López, “altamente peligrosa”, pues violenta los derechos humanos y “roza con el derecho del habeas data”, establecido en la Ley de Acceso a la Información Pública.
El jurista señaló que según el habeas data, “los ciudadanos tienen todo el derecho de exigir y de ampararse, inclusive pidiendo protección de ¿por qué razón las autoridades poseen información de una persona? (y) con qué fines va a ser utilizada”.
Las versiones extraoficiales que señalan supuestos vínculos entre el acusado Henry Fariñas —relacionado según la Fiscalía con el crimen organizado— y algunos jefes policiales, van en aumento. Al ser consultada sobre estas sospechas, Granera reaccionó airada contra directores y editores de medios.
INTIMIDACIÓN POLICIAL
“No solo jefes de la Policía han visitado el Elite, si es a eso que te referías (…) han habido otros funcionarios de gobierno, han habido directores de medios de comunicación y editores de medios de comunicación que tenemos su fotografía en el Elite (centro nocturno)”, sostuvo Granera.
Según López, “estamos frente a la confesión de parte de la jefa de la Policía que se está practicando en el país una actividad de seguimiento, por no decirle espionaje, en contra de personas que puedan frecuentar cualquier lugar”.
Según la acusación, Cabral murió el 9 de julio en un ataque armado dirigido contra el nicaragüense actualmente detenido en la Dirección de Auxilio Judicial, quien estaba encargado de los espectáculos de Cabral en la región y que ese día lo llevaba en su auto al aeropuerto. Además de Jiménez, están detenidos los guatemaltecos Wilfred Stokes Arndol, Elgin Vargas Hernández y Juan Hernández Sánchez.
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“Me parece que esto es peligroso para la intimidad de las personas y especialmente para la familia. Si la Policía en cualquier momento tiene sospechas de que una persona anda involucrada en una actividad delictiva que le dé seguimiento, pero esto supone que cualquier persona está expuesta en este momento sin ser delincuente necesariamente”, refirió López.
CIUDADANOS EXPUESTOS
Y en esto incluyó que pudiera pasar que una persona acuda con su familia a un restaurante y también puede ser fotografiada, sin conocerse el propósito.
Para el profesional del Derecho, sorprende mucho el actuar del cuerpo policial en este sentido, porque los ciudadanos lo que demandan es seguridad ciudadana, que no haya robos, que no haya violencia en las calles, que los policías de Tránsito realmente regulen la circulación, que estén atentos a brindar atención donde hay problemas, “no que la percepción de la ciudadanía es que se trata de multadores profesionales”.
En un artículo de opinión que se publica hoy en la página de opinión de LA PRENSA, el investigador del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp), Roberto Orozco, señala que aunque la actividad policial es legítima, “los funcionarios y tomadores de decisión no pueden hacer uso discrecional de esta información”, como lo hizo Granera.
“La información recopilada a los ‘sujetos de interés’ no solo es secreta, sino que su divulgación es tipificada como delito en legislaciones modernas y, además, sancionada con penas muy graves”, señala Orozco en el artículo de opinión.
Para el investigador del Ieepp, la reacción de Granera de asegurar que cuentan con fotografías de directores y editores de medios de comunicación visitando el club nocturno Elite, “fue un exabrupto” y a su criterio “administrar de esa forma la información secreta nos hace pensar que estamos frente a un tipo de espionaje intimidatorio”.
CRISIS INTERNA
El exprocurador general de la República, Alberto Novoa, tiene otra apreciación de las declaraciones de Granera. La visión es que “hay una crisis interna” dentro de la institución que esta preside de forma ilegal por orden del presidente inconstitucional, Daniel Ortega. Y según Novoa, “esta crisis deviene de defender posiciones internas de cada uno de ellos (jefes policiales)”.
Y la lectura que hace Novoa de las declaraciones de Granera es de que “cuando ella reconoce determinados hechos que ustedes sacaron en el diario, está reconociendo a luz pública que ella necesita también auxilio en su posición para seguir ejerciendo el mando, porque el mando está minado y ambivalente”.
Es más, a los ojos de Novoa, la reacción de Granera fue “una táctica defensiva, para decir no solo este y aquel está involucrado, son varios, cuando ella habla de periodistas, editores, está siendo defensiva o me voy yo o se van todos”.
El exlegislador López en tanto, cuestionó que existen algunos casos de policías que no acuden a ese centro nocturno en labor de inteligencia, sino que lo hacen bajo otro tipo de labores que no se corresponde con el grado de responsabilidad institucional que pueden tener.
(Con la colaboración de Martha Vásquez).
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