Efectivos del segundo comando militar encontraron 57 cabezas de proyectiles de mortero, una de las cuales explotó cuando fue golpeada con un mazo, por lo que una persona se encuentra grave y dos más resultaron heridas.
La Policía está tras la pista de un sujeto que vendió los explosivos como hierro al negocio de chatarra Quintanilla, de la escuela María Auxiliadora dos cuadras al Sur, en la entrada del reparto La Florida, Chinandega.
El comisionado Leonel Toruño, jefe de Seguridad Pública, dijo: “Se encontró once fragmentos del que explotó y los soldados enterraron el resto en la zona como medida preventiva”.
El coronel José Israel Estrada Walter, jefe del segundo comando militar regional, manifestó que llegarán especialistas en explosivos al lugar, que determinarán de qué forma se destruirán los explosivos.
Mientras tanto, están bajo estricto resguardo.
La Policía confirmó que el trabajador Rubén Antonio Zepeda, quien resultó con lesiones en el rostro, perdió una de sus piernas. Él se encuentra en el Hospital Escuela Óscar Danilo Rosales, en León.
Reynaldo Quintanilla, responsable del negocio, refirió que los trabajadores acomodaban la chatarra para subirla al contenedor y al oír la explosión huyeron del patio.
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