Pudo dar más

Nectalí Mora Zeledón

Otoniel Olivas, técnico del Real Estelí, no arriesgó. Así que no ganó. Se conformó. Esa imagen dejó el martes con el planteamiento en el segundo tiempo y el marcador 1-0 en contra ante la Liga Deportiva Alajuelense, en la segunda jornada de la Liga de Campeones de Concacaf.

Los ticos se impusieron 1-0, pero no tuvieron profundidad en el ataque. El Real Estelí se paró bien tácticamente atrás y cuando buscó el área en la primera parte creó mucho peligro.

Todo eso pasó en el primer tiempo cuando el Tren del Norte aprovechó el talento de sus atacantes, pero lo dejó de hacer en el resto del juego. Olivas limitó el equipo con dos cambios defensivos de los tres que realizó.

Sacó al atacante Juan Barrera por Franklin López (contención) y después a Manuel Rosas (defensa con mucha llegada) por un defensor con menos proyección, Jaime Ruiz. A partir de ahí el Estelí cambió. El juego se volvió lento, sin un jugador de perfil ofensivo, desequilibrante y contraatacó. Un recurso válido pero poco comprensible con un resultado adverso y de local. Los frutos del planteamiento fueron cuatro disparos de larga distancia, el más peligroso de Norfran Lazo, atacante que entró de cambió al minuto 83 y casi empata.

Barrera y Marlon Medina están conscientes de la buena presentación del equipo, pero no discuten las decisiones de Olivas. Ellos solo ejecutan.

“Me sorprendió el cambio. Pero son decisiones técnicas hay que respetarlas. Yo iba saliendo y no podía creerlo. Todavía me sentía con condición física para seguir jugando, pero fue decisión del técnico”, señala Barrera.

“Pienso que sí podíamos seguir jugando al mismo ritmo, pero los cambios son decisión del técnico”, afirma el defensor Medina, el mejor del partido ante los ticos. “Queda la sensación de poder haber hecho más”, coinciden los dos.

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