Guatemala/ACAN-EFE
La presidenta del Juzgado Primero de Mayor Riesgo, Carol Patricia Flores, anunciará mañana su decisión si envía o no a juicio al costarricense Alejandro Jiménez, alias “El Palidejo”, implicado en el ataque en el que murió en julio de 2011 el trovador argentino Facundo Cabral.
Después de escuchar hoy en una audiencia los alegatos de la Fiscalía y del abogado Alexis Calderón, defensor de Jiménez, Flores dijo que analizará las pruebas de cargo y de descargo y que mañana anunciará su decisión.
El fiscal del caso, Edwin Marroquín, aseguró en la diligencia que existen pruebas que demuestran la participación de “El Palidejo” en el atentado contra el empresario nicarag ense Henry Fariña, en el que murió Cabral el 11 de julio de 2011 en un sector del sur de la capital guatemalteca.
Marroquín dijo que, según el testimonio de José Benedicto Cerón, el colaborador eficaz (testigo) de la Fiscalía, Jiménez ordenó dar muerte a Fariña por una deuda de drogas.
El asesinato del nicarag ense, quien resultó gravemente herido en el ataque, fue planificado en el mes de mayo de 2011 en Costa Rica y Nicaragua, y se ordenó a través de mensajes telefónicos, apuntó.
Marroquín pidió a la jueza que en base a las pruebas anticipadas presentadas al tribunal, se envíe a juicio oral y público por los delitos de asesinato, asesinato en grado de tentativa y asociación ilícita, al costarricense.
Sin embargo, el abogado defensor de Jiménez, Alexis Calderón, sostuvo que la acusación de la Fiscalía carece de sustento jurídico porque basa el señalamiento en contra de su cliente en versiones de un testigo que es “sicario” y que participó en el atentado contra Fariña.
“La declaración de (José Benedicto Cerón) no tiene ninguna credibilidad” y “en ningún momento señala a mi cliente como el que ordenó dar muerte a Fariña”, subrayó.
“Él (Cerón) dice que la orden fue de Elgín Enrique Vargas Hernández”, expresó Calderón, quien pidió a la jueza clausure de forma provisional el proceso contra Jiménez hasta que la Fiscalía demuestre con pruebas fehacientes su participación en el hecho que le costó la vida al trovador argentino.
Vargas, según la Fiscalía, es el sicario contratado por Jiménez para dar muerte a Fariña, y éste a su vez, contrato a los otros tres guatemaltecos.
La jueza dijo que debido a los alegatos de ambas partes, hoy se le imposibilitaba dictar su resolución y que luego de analizar las pruebas dará su anuncio mañana.
También anunció que analizará la petición de Calderón de enviar a su cliente a un hospital privado debido a un cuadro de hipertensión.
De hecho, una doctora del Organismo Judicial tuvo que asistir a Jiménez durante la audiencia, debido a que se le subió demasiado la presión arterial.
“Me siento muy mal, realmente me siento mal”, dijo “El Palidejo” a la jueza.
El costarricense fue capturado en marzo pasado en Colombia y expulsado de forma inmediata a Guatemala.
Por la muerte del trovador están detenidos los guatemaltecos Audelino García Lima, Elgín Enrique Vargas Hernández, Juan Hernández Sánchez y Willfred Allan Stokes Arnold, sindicados como autores materiales. De acuerdo con la Fiscalía, los cuatro sicarios fueron contratados por “El Palidejo” para dar muerte a Fariña.
