Elízabeth Romero
El jefe del Distrito Cuatro, comisionado mayor Noel Cruz, puso de ejemplo que impulsan capacitaciones a estudiantes en los diferentes colegios de la capital.
Esto es para que ellos puedan resistirse ante las tentaciones a consumir droga. Ayer concluyó una capacitación dirigida a estudiantes del colegio Experimental México sobre esos mismos temas de prevención.
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Nicaragua sigue siendo un punto de reabastecimiento para los narcotraficantes, establece un estudio reciente de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), titulado Delincuencia Organizada Transnacional en Centroamérica y el Caribe: Una Evaluación de las Amenazas.
Ahí UNODC sostiene que las comunidades costeras de Nicaragua —incluyendo a grupos indígenas— proveen el apoyo logístico a los traficantes. Esta actividad de apoyo al narcotráfico se convierte en una de las pocas fuentes de ingreso para los habitantes de estas áreas, apunta el estudio. “Algunos pueden tener algún acuerdo formal con una red concreta de transportistas, mientras que otros simplemente pueden estar aprovechando su ubicación geográfica de forma oportunista”, dice el documento.
Dado que se trata de sitios remotos, los narcotraficantes utilizan pequeñas pistas de aterrizaje, similares a las existentes en Honduras desde donde efectúan el traslado de la coca hacia el norte, dice el estudio.
La UNODC apunta que durante décadas la región ha sido utilizada para el tráfico de la cocaína, pero el área cobró mayor importancia de forma espectacular luego del año 2000 y posteriormente después del año 2006, debido a un incremento de la aplicación de la ley sobre las drogas en México, que obligó a los cárteles a desplazarse a esta región.
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