Monterrey/EFE
Las autoridades mexicanas anunciaron la desarticulación de una célula del grupo criminal de Los Zetas, formada por 16 personas y dedicada a vender hasta 4.000 dosis de cocaína semanalmente, en el norteño estado de Nuevo León.
El grupo se encargaba de la distribución de la droga en el área metropolitana de Monterrey, capital de Nuevo León, dijo hoy el portavoz del Consejo de Seguridad del estado, Jorge Domene, en una rueda de prensa en la que fueron presentados los detenidos.
“Las principales operaciones de narcomenudeo efectuadas por estos detenidos se realizaban en la zona de Santa Catarina, Apodaca, San Nicolás y García”, precisó.
Además, los detenidos, entre los que se encuentran dos mujeres y tres menores de edad, confesaron haber participado en por lo menos cuatro asesinatos y en varios secuestros.
Domene indicó que la desarticulación de la célula se produjo a raíz de la captura el 25 de septiembre pasado de José Alonso Guerra Licon, alias “El Poncho” o “El Boss”, de 26 años, presunto jefe de la banda.
Guerra Licon, arrestado en posesión de cocaína en piedra y polvo, confesó que trabajaba para el grupo delictivo Los Zetas y que entregaba “entre 3.000 y 4.000 dosis de droga por semana en distintos puntos de venta de la zona metropolitana”, apuntó.
Después se produjeron las detenciones de los demás integrantes de la célula en diferentes acciones realizadas por personal castrense en los municipios de Apodaca, Guadalupe y Monterrey.
El portavoz indicó que decomisaron unas 5.700 dosis de cocaína con un valor en el mercado de aproximadamente 500.000 pesos mexicanos (unos 39.000 dólares). EFE