Wendy Álvarez Hidalgo y Humberto Galo
El cese repentino de la aerolínea italiana Blue Panorama era una medida casi escrita en piedra. Primero porque Nicaragua no tiene un fuerte vínculo turístico con Italia; y segundo porque el Gobierno trajo una aerolínea en crisis económica, con poca solidez financiera, consideró ayer Alfredo Gutiérrez, directivo de la Asociación de Turismo Receptivo (Antur).
Gutiérrez, quien lamentó el cierre de operaciones de Blue Panorama porque era la primera conexión directa con Europa, asegura que desde que se conoció la llegada de esta aerolínea advirtió que la sostenibilidad de esa ruta era frágil por las razones antes mencionadas.
“Es una opción menos para las agencias de viajes, pero como se trataba de una opción nueva no es una pérdida tan grande, desafortunadamente no tuvo los resultados deseados”.
[/doap_box][doap_box title=”” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
[/doap_box]
En ese momento “alerté sobre la fortaleza de esa empresa, dije siempre que esa era una empresa de bajo costo, una empresa que normalmente opera exitosamente cuando hay garantizado un flujo importante, de por lo menos que mantengan una ocupación del 70 o 75 por ciento de sus sillas”, añade Gutiérrez.
Blue Panorama, que inició operaciones hace cuatro meses y funcionará hasta hoy en Nicaragua, solicitó esta semana al Gobierno de Italia acogerse a un plan de ayuda similar al establecido en ley conocido como Chapter 11 en Estados Unidos, que ampara a compañías altamente endeudadas y que necesitan prórroga para reestructurar sus finanzas, informó esta semana el diario El Mensajero (Il Messaggero, en italiano) en su edición digital.
ESFUERZOS SIN FRUTOS
Lo que más lamenta Gutiérrez es que el esfuerzo que se hizo por abrir una conexión con Europa se haya “echado en saco roto” y apuntó que lo ideal era buscar una aerolínea que conectara con Madrid, España, con quien se tiene fuerte vínculo en Europa. “El país debe enfocarse en atraer empresas aéreas sólidas, en sus finanzas, operativamente, en su flota”, afirma.
Pero más allá de las causas que llevaron al cierre de operaciones de Blue Panorama en Nicaragua, lo cierto es que esta medida ha dejado un mal sabor entre los representantes de agencias de viajes y del sector turístico.
Lucy Valenti, expresidenta de la Cámara de Turismo de Nicaragua (Canatur), afirmó que el cese de esa aerolínea “es una mala noticia para el sector” ya que se tenía “la esperanza de que esta conexión entre Nicaragua y Europa podía seguir creciendo”.
Juan Gabriel Shütze, presidente de la Asociación Nicaragüense de Agencias de Viajes y Turismo (ANAVYT), sostiene que “esto no solo representa una opción menos para que el turismo se incremente entre ambos países, sino que también es una pérdida del esfuerzo que efectuó el Instituto Nicaragüense de Turismo para darle oxígeno al turismo en el país”, señaló Shutze.
Según Shutze, la frecuencia de vuelo de la aerolínea también jugó un papel determinante. “Con una frecuencia de vuelo de una vez por semana, además tratándose de un vuelo que se considera de largo trecho hacia un mercado que no ha sido creado formalmente, es muy difícil que una línea área levante”.
Ver en la versión impresa las páginas: 3 C