Javier Poveda
Vida
– Un pollo entero (preferiblemente orgánico) y las verduras que desees acompañar, en este caso, zanahorias. Además aceite de oliva, mantequilla y hierbas naturales como apio, romero y salvia.
– Picar las hierbas y mezclarlas con la mantequilla. Luego, engrasamos el pollo, como dando masajes en lo interno y externo.
– Meterlo cubierto al horno primero por 20 minutos 400 grados Fahrenheit, luego sacarlo y voltearlo para que se cueza bien a ambos lados.
– Si uno quiere un toque diferente, en vez de las hierbas puede mezclar jugo de naranja, mantequilla, canela y un toque de nuez moscada y clavo de olor y humectar el pollo.
– Puede rellenarlo con manzanas y darle un toque de limón. Procure no usar saborizantes, sino productos naturales.
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Hoy nos atrevimos a presentarte una propuesta diferente: un pollo entero… ojo, no cualquier pollo, este es orgánico, es decir, sin hormonas ni antibiótico y criado en pastos sin pesticidas, o sea, bastante ambiental, por lo tanto sano.
La idea vanguardista-culinaria de promover el consumo de alimentos orgánicos nace con fuerza en restaurante la Ola Verde, conocido por sus recetas vegetarianas.
Según nos explicó Carla Fjeld, directora general del restaurante, la carne del pollo orgánico es más suave, jugosa y el sabor es un tanto distinto. No hay que temer a los vegetales, no son aburridos ¿y feos? depende de la creatividad en la cocina, pero generalmente saben bien.
MUCHA VERDURA
“Las personas evitan las verduras porque creen que van a comer pura lechuga o que no se van a llenar y al rato tendrán hambre, pero no es la verdad. Los sabores, colores y texturas que tienen son deliciosas y saludables”, dijo la experta en nutrición, Carla Fjeld.
Pocas personas en Nicaragua gozan de las verduras y hierbas que abundan en el país. La nueva tendencia es: comida chatarra, algo fácil y rápido.
EL APIO EN TU COCINA
1. El apio se come crudo o cocido. Si se utiliza crudo en ensaladas, debe lavarse muy bien para quitarle los residuos de tierra. Luego sus tallos se raspan un poco para quitarles las fibras. Las hojas también sirven para condimentar caldos y sopas.
2. Es un vegetal muy nutritivo, en él se encuentran vitaminas del grupo B, A, C y E, también contiene varios minerales, entre ellos fósforo, hierro, azufre, potasio, cobre, manganeso, zinc y aluminio.
3. Si el apio que compraste está flácido, ponlo en agua con hielo, recuperará su dureza.
4. Antes de congelar cualquier vegetal hay que escaldarlos o blanquearlos, es decir meterlos en agua hirviendo y retirarlos de inmediato (no deben hervir); basta con sumergir la verdura durante dos minutos en agua hirviendo, para detener el proceso natural de deterioro y eliminar bacterias.
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