Nectalí Mora Zeledón
La Selección Nacional de Futbol ha acortado las distancias. El título de cenicienta no le pertenece en Centroamérica, menos en la Copa Centroamericana que se desarrolla en Costa Rica. Los pinoleros con un juego ordenado, agresivo y sin complejos con el balón en su poder, cayeron 2-0 ayer ante los locales que marcaron un gol en fuera de juego y a tres minutos del final.
En el primer tanto, Randell Brenes con un pase largo al área habilitó a Celso Borges. Cuando este le pasó de cabeza el balón a Cristhian Lagos (6), autor del gol, estaba adelantado. El asistente del árbitro panameño Roberto Moreno no vio la jugada y el gol valió.
Justo Lorente, portero nica, salió mal en la jugada del gol, sin embargo se reivindicó en el potente disparo de Borges que controló a dos tiempos. El tiro precedió de un centro desde la banda, acción que se repitió en todo el duelo.
Los árbitros repusieron la acción del primer gol al no señalar un penal de Donald Parrales sobre Lagos (79), quien estrelló el balón en el travesaño al final del duelo.
A pesar de la ofensiva tica, los pinoleros no retrocedieron. Atacaron con orden y jugadas elaboradas. Samuel Wilson fue un dolor de cabeza para el rival, que sentenció el partido a tres minutos del final con el tanto de Borges.
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