SAN JOSÉ/AFP
Las autoridades migratorias en Costa Rica lograron documentar a decenas de miles de nicaragüenses que radicaban en el país sin contar con papeles vigentes de trabajo o residencia, lo que imposibilitaba que accedieran a sus derechos laborales.
“Tenemos a más de 72,000 personas registrada hasta ayer (miércoles). Es una cantidad muy grande de personas”, comentó el director en ejercicio de la Dirección de Migración, Freddy Montero.
El gobierno costarricense abrió desde mayo del año pasado los llamados “transitorios”, establecidos para que los extranjeros pudieran solicitar o renovar permisos de trabajo o residencia.
Los primeros resultados indican que se inscribieron unas 3,500 mujeres que trabajan en Costa Rica como empleadas domésticas, así como 1,500 trabajadores agrícolas permanentes y más de 300 peones de construcción, todos nicaragüenses.
“Es un gran éxito porque ahora sabemos cuántas son y ya se encuentran en buena situación migratoria, cotizando para la Caja del Seguro Social y otras instituciones. Son personas trabajadoras que conviven con nosotros y aportan su esfuerzo al crecimiento del país”, afirmó Montero.
Otros 41,000 nicaragüenses se presentaron para renovar su cédula de residencia, tras tener hasta 10 años con ese documento vencido.
El único transitorio que sigue vigente hasta el 19 de abril beneficia a trabajadores de construcción.
La meta de las autoridades es regularizar a unos 100,000 extranjeros, especialmente nicaragüenses, de los cerca de 400.000 que se estima viven en Costa Rica.