“En El viaje , Adrus, personaje principal, decide observarse a sí mismo, mirar hacia dentro. Adrus busca entender su cotidianidad infernal desde su rincón de seguridad. Renuncia a su forma común e intenta reconstruir un nuevo comienzo”, argumenta el director.
[/doap_box][doap_box title=”TOME NOTA” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
[/doap_box]
El Infierno es la primera de las tres cánticas de La Divina Comedia del poeta italiano Dante Alighieri. El director de teatro Mick Sarria retoma estos cantos para llevarlos al mundo moderno en su puesta en escena de El viaje , que el año pasado presentó en Noruega, Dinamarca, Holanda, Francia y Alemania.
Sarria comenta que la obra enfoca la violencia, la desnudez a la que todos estamos expuestos como expresión de la vida. “Podría decirte que es una obra subterránea, que habla de esos infiernos a los que llegamos. El exterminio de nosotros mismos”, expone.
No obstante lo subterráneo provocado por Sarria en El viaje , deviene en los lugares que Dante ha creado, el Purgatorio y el Paraíso, en el que se proyectan todos aquellos en estado de sufrimiento, abandono, pena y tristeza. Aquellos que tienen que pagar lo que han hecho mal.
Otro aspecto que resalta Sarria de su puesta en escena es que no busca espacios en los teatros convencionales, “planteó más la dramaturgia de la acción y suprimió la voz. Es un teatro visual, en movimiento, una poética que es combinada con proyecciones como lo hice en Noruega o las presentaciones que tuve en unos túneles en Ámsterdam”.
En la actuación de 51 minutos participan Sarahy Mendoza, Adela Sarria, Marvin Corrales y la compañía de danza contemporánea Yayxall y Mick Sarria.
Ira, pereza, avaricia, violencia, fraude, traición, están reunidos en El Infierno de Dante que esta vez los lleva a las tablas Sarria, pero con un lenguaje no solo teatral sino plástico y actual sobre el momento que vivimos para despertar.
Ver en la versión impresa las páginas: 6 B