Caracas/EFE
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró hoy que le dijo “todas” las “verdades” a las altas autoridades de la Iglesia católica en el país, con las que se reunió el viernes poco antes de su viaje a El Vaticano para ser recibido por el papa Francisco.
“Les dije en privado todas nuestras verdades, todas, de manera respetuosa, inclusive con una sonrisa, pero no callé ninguna verdad. No es tiempo de callar. Es tiempo de decir las verdades. No importa si le gustan o no a alguien”, dijo Maduro en un acto en el estado de Trujillo transmitido por cadena obligatoria de radio y televisión.
El mandatario venezolano se reunió el viernes en el Palacio de Miraflores, sede del Ejecutivo, durante más de una hora con el presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, Diego Padrón, y con el nuncio apostólico en Caracas, Pietro Parolin, para conversar sobre la audiencia privada que tendrá el lunes con el papa.
Maduro indicó que en el encuentro acordaron mantener “reuniones permanentes” y que reprochó a Padrón haber perdido “la oportunidad” de “valorar en vida” al fallecido presidente Hugo Chávez, con quien el líder religioso mantuvo una relación tirante.
“Yo le dije, aquí en este palacio, en 100 años jamás pasó un presidente tan honesto, tan auténtico, tan sinceramente cristiano y ustedes perdieron la oportunidad de valorarlo en vida, ahora valórenlo en la otra vida”, expresó el mandatario en su discurso.
Asimismo, pidió a los religiosos que tomaran esa reflexión en relación a él. “Yo soy hijo de Chávez y si algo aprendí de él fue a entender y amar profundamente a Cristo Redentor, a llevarlo en el corazón de verdad”, dijo.
Al salir de la reunión con Maduro el viernes, Padrón destacó que es “una necesidad el mantener una relación frecuente” entre el Gobierno y la Iglesia, al tiempo que señaló que durante el encuentro hablaron de los “problemas que angustian al pueblo venezolano” como la inseguridad y el tema “de los encarcelados y de los que están fuera del país”, en alusión a los exiliados.
Las relaciones del Gobierno de Chávez con la Iglesia católica fueron difíciles durante gran parte de los 14 años que estuvo al frente de Venezuela, pero alcanzaron el punto máximo de tensión en 2010, cuando casi se llega a la ruptura y el ahora fallecido mandatario llamó “cavernícolas” a los prelados del país.
Maduro mantendrá una reunión privada el lunes con el papa, quien luego recibirá también a diputados de la oposición venezolana en la audiencia general que realiza los miércoles.
