Judith Flores/Miami
Veintisiete años después de la firma de los acuerdos de Esquipulas, la Asociación Fuerza Democrática Nicaragüense, Resistencia Nicaragüense FDN-RN, está demando el cumplimiento de esos acuerdos suscritos en Ciudad Guatemala, el 7 de agosto de 1987, durante la primera administración de gobierno del hoy inconstitucional presidente, Daniel Ortega.
Pablo Hernández, secretario de relaciones internacionales de esa asociación de desmovilizados excontras, con representación en Estados Unidos y Nicaragua, informó que han iniciado una campaña de denuncia contra el actual gobierno sandinista. La FDN-RN es una asociación de desmovilizados de la contra, con representación en Nicaragua y Estados Unidos, que demanda el cumplimiento de los acuerdos de paz.
En Miami se reunieron con representantes de los congresistas republicanos Ileana Ros-Lehtinen, y Mario Díaz-Balart, el demócrata Joe García, y el senador Marco Rubio, a quienes les presentaron un informe de los crímenes cometidos contra miembros de la Resistencia, y el incumplimiento a los acuerdos de Esquipulas.
“Donde esa la Comisión de Verificación. Los acuerdos de Esquipulas es un tratado internacional y se debe de respetar”.
Una de las principales demandas de la FDN-RN, es la total transparencia de las elecciones del 2016, que considera tienen que darse acorde a Los acuerdos de Esquipulas, con observadores de la Organización de Naciones Unidas (ONU), y la Organización de Estados Americanos (OEA).
Las últimas elecciones en Nicaragua, se han visto empañadas por el fraude y la violencia debido a los abusos del partido gobernante.
La organización ha denunciado ante los representantes estadounidenses los crímenes contra cabecillas de la Resistencia Nicaragüense, luego de la desmovilización en 1990, la parcialidad de la Policía en las investigaciones, y los abusos a la Constitución y las leyes por el actual régimen sandinista.
Hernández informó que la FDN-RN gestiona una audiencia ante el Congreso de Estados Unidos, para denunciar los abusos y crímenes del gobierno de Daniel Ortega.