Leonor Álvarez
Antes de pensar en elecciones presidenciales se debe exigir cambios en el Consejo Supremo Electoral (CSE), de lo contrario la participación de los partidos opositores en los próximos comicios de 2016 solo será prestarse al juego del gobierno del presidente inconstitucional Daniel Ortega, según la opinión de actores políticos que también ven con duda el proceso de unidad de los liberales.
“UNIDAD ELECTORERA”
El exdiputado José Pallais cree que el proceso de unidad de los partidos Liberales Independiente (PLI) y Constitucionalista (PLC) es un esfuerzo para lograr una “unidad electorera”.
Sin embargo, Pallais considera que lo que deberían estar buscando los liberales es una “unidad” con todos los sectores civiles, políticos y partidarios, para exigir cambios en el sistema electoral, antes de pensar en participar en unas elecciones que no tendrán credibilidad si no se cambia a los actuales magistrados acusados de fraude.
En 2009 el Partido Liberal Constitucionalista (PLC), la Bancada Democrática Nicaragüense (BDN), el Movimiento Renovador Sandinista (MRS) y la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) firmaron los acuerdos de Metrocentro I y II, con el objetivo de cerrar filas en contra del gobierno de Daniel Ortega, con vista a las elecciones de 2011.
En 2010, el obispo de Estelí, monseñor Abelardo Mata, medió un diálogo fallido entre los partidos opositores, especialmente los liberales con mayor fuerza en la Asamblea Nacional.
El 20 de agosto de 2013 se formó un bloque opositor conformado por ciudadanos, organizaciones y partidos denominado Unidad por la República.
Lo más reciente ha sido el proceso de unidad entre los miembros del PLC y el PLI, pero aún está en veremos.
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El exdiputado liberal explicó que sin los cambios en el CSE, los partidos liberales solo terminarán de perder la “poca credibilidad que tienen”, porque ya nadie creerá en ellos luego de hacer tantas críticas al CSE y finalmente siempre participan a sabiendas de que se cometerá fraude.
Pallais considera que esa actitud contradictoria, de participar en unas elecciones para perder, solo se podría explicar por un interés del PLI y del PLC de mantener sus escaños de diputados, aunque solo logren minoría en el parlamento y en los espacios de poder.
El asesor en temas de gobernabilidad, coronel en retiro Irving Dávila, manifestó que los liberales puede que se estén preparando para participar en las próximas elecciones presidenciales, pero si lo hacen sin lograr antes el cambio de los actuales magistrados del CSE, solo deben esperar más de lo mismo.
“Llegar a unas elecciones sin que se cambie el concepto de unidad y sin que se cambie el CSE ya sabemos que va a ser lo mismo del 2011 y lo mismo del 2006”, manifestó Dávila.
Además, Dávila considera que el proceso de unidad no está tomando en cuenta la decisión de las bases.
En ese sentido, Dávila valoró que el proceso de unidad debe de hacerse desde la base, es decir, desde los líderes municipales.
“La unidad debe construirse desde un proceso de democratización donde las bases tengan la oportunidad de elegir sus liderazgos de abajo hacia arriba y no llegar de arriba a abajo para imponer liderazgo”, expresó el especialista en temas de gobernabilidad.
“Los partidos se equivocan pensando que la unidad es solo de los liberales y que ellos van a aglutinar al resto de la sociedad, se equivocan totalmente”, agregó Dávila.
PRIMERO LA UNIDAD, LUEGO EXIGIR CAMBIOS
El diputado opositor y miembro del PLI, Eliseo Núñez Morales, manifestó que por el momento no han llegado a la parte del proceso donde planifiquen una estrategia para exigir cambios en el CSE.
Núñez explicó que primero están en el proceso de concretar la alianza entre los partidos liberales; segundo será exigir cambios en el CSE; tercero buscar más aliados, y de llegar a 2016 sin cambios en el CSE, entonces se tendrá que valorar la participación en las elecciones.
Núñez dijo que el PLI está claro de que los cambios en el CSE solo se van a lograr con presión social y con participación en las calles.
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