Nota 9 de 16
El San Fernando ha sido el escolta de la Costa Caribe en jonrones durante las últimas dos temporadas y solamente el Estelí conecta más hits que ellos en este mismo período. Sin embargo, el pitcheo es otra historia y por esto no han podido pasar de la segunda ronda en las últimas ediciones del Campeonato Nacional de Beisbol Superior.
En ese sentido, el manager Omar Cisneros anunció una rotación de abridores con puros chavalos, compuesta por Gerald Rojas (20 años de edad), Kevin Reyes (18 años), Osmany Hodgson (18 años), Alís Sotelo (18 años) y Luis López Navarrete (19 años), con la idea de formar a los lanzadores que sacarán al equipo de su letargo de siete años sin ganar el título.
1. Franklin López hijo SS
2. Jaime Soza BD
3. Renato Morales CF
4. Marlon Abea C
5. Yáder Hodgson LF
6. Freddy Chévez 1B
7. Jason Palacios 3B
8. Norman Cardoze hijo 2B
9. Nelson Gaitán RF
ROTACIÓN DE ABRIDORES
Gerald Rojas (20 años)
Kevin Reyes (18 años)
Osmany Hodgson (18 años)
Alí Sotelo (18 años)
Luis López N. (19 años)
HISTORIA
El San Fernando no gana el Campeonato Nacional desde la temporada 2003-04.
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Rojas, quien incluso estuvo firmado por los Yanquis, es el más experimentado de ellos.
“La orientación de la Junta Directiva es desarrollar jugadores, especialmente lanzadores. Los veteranos como Juan Carlos Solórzano y Eddy Olivas van a ser relevistas, mientras que los chavalos se van a fajar abriendo juego. Es más, otros dos menores, Santiago Murillo y Antonio Zavala, van a ser relevistas largos”, asegura el manager Omar Cisneros.
“Llevamos a 14 juveniles en el roster de 22. Estoy seguro que ningún otro equipo inscribirá más chavalos que nosotros. Este grupo de jugadores hizo campeón a Masaya en la liga juvenil y en dos o tres años serán la base del San Fernando”, explica Omar.
Mientras ese momento llega, las Fieras seguirán dependiendo de su bateo.
Jaime Soza, Renato Morales, Marlon Abea, Yáder Hodgson y Freddy Chévez en línea, sin dudas formarán el núcleo más temible de bateadores de la liga, del segundo al sexto puesto en el line-up. Todos ellos, excepto Chévez, batearon sobre 300 puntos.
No obstante, el año pasado faltó sincronización en el ataque, pues aunque fueron el equipo de mejor promedio de bateo con .275, además de ser segundos en hits con 611 y jonrones con 22, saltaron hasta el sexto lugar en carreras anotadas con 273, apenas dos más que Rivas.
Siendo Omar Cisneros uno de los managers más competidores de la liga, ya veremos si persistirá el plan por desarrollar lanzadores y cultivar los frutos con el paso de los años, antes que echar mano de los veteranos en busca de ganar ya.
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