Sonriente y siempre con buena actitud, así es Damarys Núñez quien tiene alrededor de 25 años de ser diseñadora, aunque si le suma los años que lo hacía por pasatiempo se hacen más de 30.
En sus desfiles se caracteriza por ser puntual, organizada y detallista.
El ser diseñadora y ser mamá, son las dos cosas que más le apasionan. Está casada con un chileno y siempre que puede cuenta lo orgullosa que está de Eduardo, Rafael y Damarys, sus hijos.
¿Cómo fueron sus inicios siendo diseñadora?
Pienso que eso es un talento natural que cada persona trae. Pero también me ayuda que mi mamá siempre fue modista y crecí rodeada de máquinas de coser. El primer día que agarré una tenía 9 años.
¿Empezó como un pasatiempos o siempre fue un trabajo para usted?
Siempre esperaba ansiosa el fin de semana para hacer mis diseños. En la residencia universitaria yo sacaba mi máquina de coser portátil y me ponía el fin de semana a hacer diseños. Me gradué en Artes y Letras, pero paralelo hacía mis diseños. Fue muy espontáneo que aprendí, pero hice un proceso inverso. Estudié diseño en México y participé en varios talleres de costura ya con diseñadores y recibí la parte teórica. Después de ya saber hacer patrones de vestidos. Es algo que siempre me ha gustado hacer y se fue dando de manera natural y espontánea.
¿Recuerda cómo fue su primera pasarela?
Sí, fue en los años ochenta. Mi primera colección fue con telas de mantas que era lo que había en el país, las ponía de diferentes colores, las teñíamos y como siempre le apliqué una flor. Fue una etapa muy romántica de mis diseños.
¿Ha cambiado de alguna manera el mundo de la moda en Nicaragua?
Sí claro. Antes había que hacer todo. Las modelos no eran profesionales, nosotros como diseñadores teníamos que enseñarles cómo modelar, las maquillábamos, las peinábamos, buscábamos los accesorios, era mucho más trabajo. Ahora las telas están preparadas, antes había que hacerles un proceso, lavarlas, teñirlas, imprimirles diseños, con papas, con cera, con colorantes diferentes, lo bonito es que todo era como muy artístico y cada pieza era diferente de la otra.
¿Tiene algún sello personal en sus diseños?
Si siempre hago uso de las flores y eso la gente reconoce mis diseños. Siempre me gusta incluir alguna flor aunque sea un vestido liso.
¿Alguna mala experiencia?
La verdad no, soy muy previsora, detallista, soy puntual, eso me da una gran ventaja, puedo revisar todo con tranquilidad, sin estresarme, yo puedo estar una o dos horas antes.
El sábado pasado, Núñez participó en el evento Glamour 2001. Presentó una colección de vestidos cortos con escotes.
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