Ramón Villarreal
Massiel López Jarquín, de 26 años, hija de Carla María Jarquín Chamorro, conocida como “Carla ñata”, calificó de absurda la acusación por crimen organizado, lavado de dinero y transporte internacional de droga que el Ministerio Público le está haciendo a su progenitora, al involucrarla como parte de la red narco del costarricense Alejandro Jiménez, alias “El Palidejo”.
“No entiendo cómo pueden relacionar a mi madre en un caso de droga como este, si ella ni siquiera puede caminar mucho a pie porque se cansa, tiene problemas de hipertensión, padece de migraña y depresión continua, más bien a ella la tenemos que acompañar en sus giras de trabajo como comerciante y es absurdo que se encargue de trasladar droga por puntos ciegos y el lago, todo eso es una gran mentira”, dijo López Jarquín.
Dijo que su madre no conoce a la gente con quien la vinculan en la acusación, “ella siempre ha sido una mujer muy cristiana, trabajadora y enferma y cuando tiene un tiempo libre lo ocupaba para descansar”.
Aseguró que su progenitora estuvo dos años sin salir del país por problemas económicos.
HACIA PANAMÁ
“Cada salida que ella hizo a Panamá dos años hacia atrás y el pasado 26 de mayo, podemos demostrar con facturas en mano las compras que ella hizo en las tiendas panameñas, de ropa, calzado, cosméticos y otros productos que traía a vender en las tiendas y clientes particulares de Rivas”, añadió la muchacha.
Según la familia de Carla María Jarquín Chamorro, esta se ha dedicado al comercio toda su vida, ha sido dueña de una distribuidora de productos básicos y vendió pólvora en Rivas durante ocho años.
“Creo que los nicaragüenses tenemos derecho a trabajar y salir a comprar al extranjero y venir a vender en Nicaragua, esa es una forma honrada de ganarse la vida, y las autoridades más bien deberían de dar facilidades y no tratar de enredar a la gente honrada y trabajadora, para encubrir quién sabe a quién”, lamentó López.
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