Las causas más comunes de las infidelidades son:
1. Circunstanciales: Se da cuando la persona está enamorada y apegada a su pareja, pero sucumbe a su deseo sexual por otra persona. Típicamente, este tipo de infidelidad está impulsado por las circunstancias —se dio la oportunidad (por ejemplo: un viaje)—, se abusó del alcohol o las drogas, se tiene la fantasía de que “solo va a ser una vez y nadie se va a enterar”.
2. Insatisfacción marital: El no estar contento con la vida marital incrementa por cuatro las posibilidades de ser infiel. Pero en general, si sentís que “algo” falta en la relación y no lográs encontrar una solución a tu carencia, serás más susceptible a la infidelidad.
3. Personales: * Mientras más atractiva la persona, más en “demanda” está y por lo tanto se incrementan las posibilidades de infidelidad. El atractivo puede venir de varias cualidades: puede ser belleza física, habilidades sociales, poder o dinero.
* Mientras más aventurera, arriesgada y necesitada de novedad sea la persona.
* Mientras más derecho crea la persona que tiene a ser infiel, más proclive a serlo será. Esta creencia viene de su posición social, su creencia acerca de los roles de género o su formación cultural. Cuando la persona cree que el ser infiel es su derecho, lo hace con poca culpa o remordimiento.
* Mientras más deseo sexual e interés por el sexo tenga una persona.
* Mientras menos sagrado te parezca el acuerdo que te une a tu pareja, más le huyes a la intimidad y la cercanía con los demás, más cínico en tus ideas acerca del amor y más egoísta en cuanto a tus opciones de vida seas, más predispuesto estarás a tener varias parejas sexuales.
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