14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Nota privada

Augusto, querido amigo: En el parque me encontré un Alma llorando y temblando de hambre y de frío.

Augusto, querido amigo:

En el parque me encontré un Alma llorando y temblando de hambre y de frío.

Yo inmediatamente me la puse y he andado con ella alimentándola

y tratando de borrarle las decepciones de su vida.

Pero mucho se queja. Dice que mi Alma es muy grande

y que le da pena seguir incomodándola, que por favor encuentre a su dueño,

que su dueño es bueno en lo íntimo de la noche callada,

que se llama Augusto y que ese Augusto tiene sesenta y seis años de ser adicto

al demonio, al mundo y a la carne.

Yo no se lo he dicho a nadie,

pero te escribo por si acaso no te has dado cuenta que la perdiste.

Yo aquí te la tengo.

Abrazos.

Cultura literatura Poema archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí