Roy Moncada
Pasaron semanas y ninguna entidad buscaba cómo parchar con asfalto, tan solo rellenaban con tierra.
Los pobladores de estos lugares denunciaron a Enacal por empeorarles el camino y fue hasta meses después que se colocó asfalto.
Ante la situación, Ruth Selma Herrera, expresidenta ejecutiva de Enacal, explicó que cuando se realizan trabajos similares, la municipalidad y la aguadora deben ponerse de acuerdo y decidir cuál de las dos lleva a cabo el bacheo.
Sin embargo, se ha evidenciado que existe la mala práctica de romper la calle, sea para realizar una conexión domiciliar o cambio de tubería mayor, y no se deja la vía como se encontró.
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Conducir por la Calle del Triunfo, ubicada en el Distrito Dos de Managua, se convirtió en algo tormentoso desde que una compañía contratada por la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) arrancó adoquines para meter tuberías de agua potable y no los volvió a colocar al finalizar el trabajo encomendado.
Esta obra incompleta provoca que ahora el tránsito de los cabezales, camiones y vehículos livianos recurran a maniobras de zigzag para evitar las zanjas que están abiertas desde hace más de tres meses.
PERJUDICADOS
Julio Parrales, quien vive en esta zona, comenta que el problema no ha sido atendido por la aguadora y agrega que el polvazal perjudica a los negocios, el paso de transeúntes y altera el tráfico vehicular.
Moisés Ruiz es otro poblador que se queja de las zanjas y aunque reconoce que es un proyecto social para hacer mejoras a la población, lamenta que Enacal deje hoyos abiertos por toda la capital, afectando el tráfico y los vehículos particulares que se dañan al pasar sobre las zanjas.
ETERNA MALA PRÁCTICA
Ruth Selma Herrera, expresidenta ejecutiva de Enacal, aclaró que en estas situaciones la empresa que fue contratada tiene un promedio de 30 días para reparar la calle, de lo contrario no se le cancela por el trabajo realizado.
En el caso de la Calle del Triunfo, han pasado más de tres meses y ninguno de los adoquines está en su sitio.
La expresidenta ejecutiva de Enacal menciona que esto evidencia la falta de inspección.
“La empresa contratista cuando presenta su presupuesto debe contemplar hasta el reparar la calle, si no se contempló en el contrato, entonces la Alcaldía tiene que repararla”, expone Herrera.
CONVENIO QUE FUNCIONABA
La ex funcionaria recuerda que en la administración municipal 2005-2008 del ingeniero Dionisio Marenco, Enacal tuvo un convenio que consistía en que la comuna reparaba las calles a cambio de no pagar los recibos de agua en los mercados y las propias instalaciones de la Alcaldía de Managua.
Ahora no está vigente.
