La alcaldesa de Santa Teresa, Xiomara Lezama, quien asumió la Alcaldía después de la renuncia de Iván Dinarte, tiene un reto que ningún alcalde ha podido cumplir: reparar las calles del casco urbano de la ciudad, que están en muy mal estado.
Esa problemática ha ocasionado que las aguas servidas se estanquen y el hedor inunde la ciudad. Además, la población debe lidiar con la proliferación de zancudos.
“Nosotros queremos que reparen las calles, esto ha sido un problema de toda la vida y la municipalidad nunca nos ha dado respuesta, ahora con esta nueva alcaldesa nosotros esperamos que reparen las calles y hay otras que hay que volverlas a hacer porque están totalmente destruidas. Yo creo que ese debería ser el primer proyecto”, dijo Andrea Umaña, una de las habitantes de Santa Teresa.
La población afirma que cuando llueve es peor la situación, porque la ciudad no cuenta con alcantarillado sanitario, lo que provoca que el agua quede estancada.
Han pasado menos de 15 días después de la renuncia del alcalde Iván Dinarte y aunque no se han aclarado los motivos de su retiro, en el pueblo se rumora la mala inversión del exalcalde.
“Fueron dos períodos que estuvo Iván Dinarte y no vemos progreso en el pueblo, al contrario, la Alcaldía quedó con una gran deuda, que hasta los trabajadores han amenazado con protestar porque tienen un salario retrasado”, señaló Omar Vargas, miembro de la Juventud Sandinista.
El municipio de Santa Teresa fue elevado a ciudad en 1949, este es uno de los pueblos más productivos de Carazo, porque la población se concentra en el área rural, sin embargo los avances han sido pocos.
Se buscó la versión de la nueva alcaldesa Xiomara Lezama, pero esta se encontraba en reunión en Managua.
LA PRENSA/ M. CALERO
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