Pese a que la propuesta del Presupuesto General de la República 2015 incorpora un importante incremento de recursos al programa de inversión en infraestructura, la burocracia estatal sigue “comiendo” la mayoría de los fondos públicos.
Además el ejecutivo acomoda los cambios estructurales del Ministerio Agropecuario (MAG) y del Ministerio de Industria, Fomento y Comercio (Mific), por lo cual tendrán menos fondos. Estos ministerios junto con el de la Familia, Gobernación, Defensa y el Consejo Supremo Electoral son las seis instituciones que sufren disminuciones en sus fondos en 2015.
El gasto total se plantea en 61,034.9 millones de córdobas el próximo año. De acuerdo con el documento oficial se aumenta en 6,296.1 millones de córdobas (un 11.5 por ciento).
Sin embargo en la distribución de los recursos, el gasto corriente, es decir para pagar la burocracia estatal se incrementa 12.7 por ciento que representa 5,201.6 millones de córdobas.
Mientras el gasto de capital crece a 14,884.8 millones de córdobas, un 7.1 por ciento que representan 1,095.2 millones adicionales al Presupuesto modificado del 2014.
Para el diputado de la Bancada Partido Liberal Independiente (Bapli), Eliseo Núñez, la primera lectura es que “se trata de un Presupuesto donde se ensayan políticas anticíclicas para enfrentar la desaceleración de la economía”.
Y añade: “Lo que temo es que las autoridades hayan sido demasiado optimistas en que logren impulsar la reactivación del sector construcción, porque si la desaceleración continúa y no hay inversión privada es posible que veamos a mediados de año recortando el Presupuesto”.
Considera además que aún cuando habrán aumentos al Plan de Inversión Pública (PIP) de infraestructura escolar y hospitalaria, para Núñez “hay todavía una deuda porque no impulsa la reforma para mejorar la calidad de la enseñanza ni de la atención médica, y siguen siendo insuficientes los aumentos salariales” a los trabajadores.
El PIP total sería 16,106.6 millones de córdobas, que incluye a las empresas públicas. Solo el PIP del Gobierno central se estima en 13,024.0 millones de córdobas, un incremento de 1,031.3 millones.
De esa partida, 1,167.9 millones de córdobas será el PIP del Ministerio de Salud (Minsa y el del Ministerio de Educación (Mined) por 708.5 millones.
El Minsa ejecutará 16 obras entre ellas dos nuevos hospitales en Corn Island y en El Jícaro, Nueva Segovia, y el reemplazo del de San José de Bocay, Jinotega. También se rehabilitarán 12 estructuras entre hospitales y centros de Salud.
El Gobierno presupuestó para el otro año menos proyectos del Minsa, porque en 2014 fueron 23 construcciones —aunque solo un hospital que fue el de San Francisco Libre, en Managua—, y 27 rehabilitaciones de centros de atención médica.
El PIP del Salud crecerá en particular por el inicio de la construcción del Hospital de la Zona Occidental de Managua que costará 305 millones de córdobas.
En cuanto al Mined su PIP contempla el reemplazo de 23 preescolares y colegios, y se construirá una Escuela Normal, así como rehabilitar y mejorar la estructura de unos 40 centros escolares. Si bien en 2014 se planificaron 151 obras en Educación, el PIP de este ministerio sufre un gran retraso de ejecución, lo que motivó una intervención del Gobierno.
Mario Arana, economista y exministro de Hacienda, valora preliminarmente que “se va en dirección correcta” si los presupuestos del país deben privilegiar la Salud y la Educación, pero “aún vamos muy rezagados porque al menos debemos asignar el siete por ciento del Producto Interno Bruto a Educación”.
Más plata para subsidios
Pese a que en el Programa Económico Financiero (PEF) el Gobierno se compromete a impulsar una política de racionamiento de los subsidios, en 2015 se incrementan en 106.5 millones de córdobas para cubrirlos.
La partida para los subsidios prevista es de 1,043.3 millones de córdobas destinados a mantener congelada la tarifa de pasaje del transporte urbano de Managua y de Ciudad Sandino, así como los subsidios de la energía eléctrica en los asentamientos, la energía, agua y teléfono a los jubilados.
Además del subsidio eléctrico a las universidades públicas y los centros técnicos. Mario Arana, exministro de Hacienda, ve mal que las autoridades “vayan contra los lineamientos” del PEF porque los subsidios es correcto bajarlos ya que “no están enfocados en los pobres, aquí se beneficia a moros y cristianos”, especialmente en el tema de la energía.
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