Con la promesa de una presentación para “tal vez la próxima semana”, Wilfried Strauch, asesor científico del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), respondió a LA PRENSA ante la consulta de cuáles fueron las conclusiones de la investigación realizada por la supuesta caída de un meteorito en Managua el 6 de septiembre de 2014.
La explosión, ocurrida a eso de las 11:00 de la noche, fue percibida por los managuas e incluso en municipios cercanos, como Ticuantepe y Nindirí, y se produjo en la zona del kilómetro 9.5 de la Carretera Norte, en los límites de las instalaciones de la Fuerza Aérea del Ejército.
Al día siguiente, el 7 de septiembre, a través de una comisión de funcionarios el Gobierno aseguró que el estruendo fue causado por la caída de un meteorito, aunque días después se dijo que esto era una hipótesis y no una afirmación.
Acompañado por otros científicos del Ineter, Strauch informó en días posteriores que se había establecido contacto con el Instituto de Geociencia de Alemania y manifestó que existía una solicitud por parte de Nicaragua a Estados Unidos para oficializar colaboración y seguir investigando el suceso.
La administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA) en ese momento afirmó que el paso del asteroide 2014 RC no estuvo relacionado con la explosión ocurrida en Managua y descartó la posibilidad de que el cráter haya sido creado por un meteorito.
12 metros de diámetro y 5.5 metros de profundidad tenía el cráter que dejó la explosión. La NASA aseguró que cualquier roca espacial capaz de dejar un agujero de ese tamaño “habría generado una bola de fuego muy brillante”.
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