Roxana Palacios Duarte aceptó ayer ante el juez Henry Morales haber vendido y canjeado cocaína por electrodomésticos de dudosa procedencia en su casa de habitación en el barrio Batahola Sur y en entregas rápidas en una moto negra sin placa, según acusación del Ministerio Público.
“Estoy admitiendo los hechos de lo que se me acusa para que me ponga la pena mínima. No estoy presionada y lo estoy haciendo de mi libre y espontánea voluntad”, dijo Palacios, durante audiencia inicial en el Juzgado Sexto Distrito Penal de Audiencia.
La acusada agregó que es madre de tres hijos, uno de 16, 14 y 12 años, y que era primera vez que estaba presa. El judicial después de la admisión de hechos de Roxana la declaró culpable de tráfico de estupefacientes y pasó al debate de la pena.
PIDE MÍNIMA
La Fiscalía pidió siete años de prisión por ser un delito grave y cuatrocientos días de multa. Sin embargo, Ramón Rojas, abogado de la procesada, pidió la pena mínima de cinco años de cárcel porque considera que no hay agravantes, pero si se debe tomar en cuenta que la admisión voluntaria y que no posee antecedentes penales.
Según la acusación, un oficial de Policía le dio seguimiento a la procesada desde el 25 de septiembre de este año y fue hasta el 17 de octubre que la capturaron, cuando allanaron su casa y le encontraron veinte bolsitas plásticas con cocaína dentro de un bolso.
66.3 gramos de cocaína le fueron ocupados a Roxana Palacios Duarte, declarada culpable de tráfico de estupefacientes en perjuicio de la salud de la sociedad nicaragüense.
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