El ingenio Montelimar inauguró ayer la planta de cogeneración Green Power, que inyectará al sistema de distribución eléctrica 38 megavatios hora. Con este aporte la matriz energética de Nicaragua si sitúa en un 60.1 por ciento de generación con base en fuentes renovables. Además reducirá los costos promedio de venta a la distribuidora eléctrica.
La Corporación Montelimar invirtió 76 millones de dólares en la planta que generará energía con el bagazo de caña y en ampliación de la capacidad de molienda del ingenio, que produce 1.4 millones de quintales de azúcar por zafra.
“Las inversiones son compatibles con el medioambiente, se han sembrado dos millones de árboles y tenemos 225 manzanas de espejos de agua… y nuestra prioridad es cómo sembramos más árboles para cosechar agua”, detalló Ernesto Fernández Holmann, directivo de Corporación Montelimar.
“Antes todos los generadores le vendíamos a la distribuidora en promedio a 18 centavos de dólar; hoy le estamos vendiendo a 9 centavos de dólar (el kilovatio), es decir, hemos reducido a la mitad el precio promedio de compra de la distribuidora”, dijo el presidente de la Cámara de Energía de Nicaragua (CEN), César Zamora Hinojos.
Según Zamora, esta merma en el precio promedio ha beneficiado a los consumidores con una reducción acumulada del 15 por ciento en la tarifa. También ha servido para que al concluir este año se haya pagado la mitad del crédito que se solicitó entre 2011 y 2013 para subsidiar la tarifa; y para trasladar unos cincuenta millones de dólares al Fondo de Combate a la Pobreza.
GENERACIÓN SUPERIOR A LA DEMANDA
Por su parte, el titular del Ministerio de Energía y Minas (MEM), Salvador Mansell, dijo que “esta planta que se incorpora a la matriz energética viene a cambiar la capacidad instalada que teníamos a inicios del 2007, que era aproximadamente de 700 megavatios y que hoy (ayer) con la integración de esta planta alcanzamos 1,329 megavatios y una demanda máxima de 680 megavatios”.
Esto permite, según Mansell, una generación de energía renovable casi equivalente a la demanda máxima. Pero también tener un respaldo de generación térmica que permite hacerle frente a interrupciones en la generación renovable provocadas por el clima (falta de agua o viento), mantenimientos y reparaciones, sin tener que interrumpir el servicio a la población.
Este es el tercero de cuatro ingenios que funcionan en el país que inyecta energía al sistema. Está previsto que a finales de 2018 entre el cuarto (Benjamín Zeledón) y proporcione 40 megavatios. También, según Zamora, hay proyectos hidroeléctricos que aportarán unos 10 megavatios que están pendientes de aprobación en el MEM.
“Hemos acordado con el Gobierno que de ahora en adelante todo proyecto nuevo tiene que tener tarifas que sean más baratas que la energía que se deja de generar o se sustituye para que haya una reducción a la tarifa”, sostuvo Zamora.
Añadió que de cara al futuro lo que quieren es “que todo nuevo proyecto sea licitado para darle mucha más transparencia”, además confirmó que de los contratos vigentes el noventa por ciento se licitó y que con estos contratos vigentes, aunque el precio del petróleo vuelva a los niveles de cien dólares por barril, “los generadores estén protegidos y puedan sostener el precio”.