Tres meses más de prisión preventiva deberá pagar un hombre de apellido Umaña, a quien las autoridades judiciales costarricenses le siguen una investigación por los delitos de homicidio, tentativa de homicidio y violación en contra de dos menores de edad de origen nicaragüense, hecho ocurrido en la zona de Upala en el mes de mayo del 2015.
Las víctimas fueron Alexander Espinoza, de once años, fallecido en el hecho y su hermana de nueve años, quien sobrevivió.
La medida cautelar la impuso el Juzgado Penal de dicha localidad, luego de que al parecer, el sospechoso, el cual es también vecino de la zona, los habría atacado mientras se dirigían al centro educativo donde estudiaban.
Presuntamente, Umaña los interceptó cuando transitaban por un camino de lastre, momento en el que los habría golpeado para posteriormente dar muerte al niño de 11 años frente a su hermana.
La niña logró escapar y fue encontrada al día siguiente por los socorristas.
El sospechoso fue detenido un día después de lo ocurrido por las autoridades judiciales, luego de que saliera del campo donde laboraba. Ahora deberá permanecer en prisión preventiva mientras siguen las investigaciones del caso.
El interés del hombre fue, al parecer, era abusar de la niña, quien apareció golpeada, llorando y con hipotermia en la zona montañosa por donde había desapareció.
Su hermano Alexander fue hallado muerto, sobre unas hojas de chagüite, en una quebrada a unos 100 metros de donde estaba ella. Según información preliminar del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), el niño quiso defender a su hermana del abuso y en cambio fue agredido por el sospechoso.
Al parecer el hombre lo golpeó y ahogó en la quebrada. Al menos fue lo que la niña habría dicho al señalar a Umaña como el autor del crimen.