Después de diez días de detención ilegal, Carmelo Calonge fue liberado por la Policía Nacional el pasado jueves, justamente dos días después de que sus familiares denunciaron su desaparición.
El hombre oriundo de El Ayote asegura que estaba detenido en Managua, en El Chipote, donde en los interrogatorios la Policía presuntamente le practicó choques eléctricos en la espalda y en la cintura para hacerle confesar. “Yo sentía como que me quitaban la vida”, denunció Calonge.
La Policía no respondió a esta denuncia. Aparentemente la captura de Calonge es parte de las redadas que realiza la Policía en esa zona, tras el crimen cometido contra el jefe de la Policía de Boaco, comisionado general póstumo Buenaventura Miranda Fitoria, el pasado 27 de julio, en Boaco.
Según Calonge, los policías que lo sacaban a los interrogatorios le insistían que revelara dónde está Tomás Díaz García, conocido como “El Guapo”, quien dijo fue criado por una tía suya, pero que alega que ni él ni su familia saben dónde está.
Afirmó que la Policía le repetía que “(los Calonge) le pagamos (a ‘El Guapo’) para que matara al comisionado. Nosotros tenemos años que no sabemos de él”.
Sin embargo, el hombre sostiene que ellos son inocentes de esta denuncia que alguien hizo en su contra y ante la negativa de él en los interrogatorios, fue que lo liberaron el jueves pasado.
El martes 16 de agosto su familia había denunciado su desaparición, pero el jueves que lo liberaron en Boaco, los policías le advirtieron que lo hacían por voluntad de ellos.
Calonge recordó que junto a su hermano Santos Calonge, el pasado 7 de agosto se encontraba en una reunión en la que participaba el alcalde de El Ayote, Erasmo Reyes, cuando la Policía los capturó “para investigar”.
“Dicen ellos que somos matones, no, nosotros no nos metemos con nadie”, alegó Calonge en su defensa, y quien aseguró que él se dedica a la ganadería. Y tampoco tenía nada en contra del jefe policial de Boaco.
CPDH: ES UNA CONSTANTE
Sobre la denuncia de Calonge, el asesor legal de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), Pablo Cuevas, expresó: “Lamentablemente no es una novedad, es una constante”.
Este hecho “es criminal” y la Constitución establece que en Nicaragua “está proscrita” la tortura y el Código Penal “criminaliza” el hecho de que un funcionario incurra en esto, dijo Cuevas.
Cuevas expresó que esa organización ha conocido varios casos como el expuesto por Calonge.
El abogado de Calonge, Manuel Urbina Lara, recordó que “esos son abusos que cometen los funcionarios de Auxilio Judicial” a la hora de investigar a los detenidos.
Urbina Lara considera que ante la falta de capacidad de investigar por parte de los funcionarios policiales, se ha vuelto una costumbre que incurran en “golpes, puntapiés y corrientazos eléctricos”.
Recordó que además Calonge nunca fue remitido a ningún tribunal, pese a que permaneció detenido de forma ilegal por más de diez días.
CRITICA ASEVERACIÓN DE LAS AUTORIDADES
Santos Calonge fue detenido junto a Carmelo el 7 de agosto en El Ayote, Caribe Sur, pero fue acusado días después en un juzgado de Managua de portación ilegal de armas.
“Solo ahí se mira cómo son las mentiras”, manifestó Wilfredo Calonge, hijo de Santos Calonge y sobrino de Carmelo Calonge, quien recordó que el día de la detención hablaban con el alcalde de El Ayote, Erasmo Reyes, sobre la construcción de un camino. La Fiscalía expuso en la acusación que Santos había acudido a Auxilio Judicial a una entrevista, cuando la verdad es que fue detenido.
