En el descubrimiento de nuevas figuras, desde el surgimiento de Juan Francisco “El Gallo” Estrada en el estrellato del boxeo mexicano y mundial, no ha habido otro que cause tanto ruido a nivel de los pesos pequeños como el que está haciendo ahora Luis “Panterita” Nery, de nada más de 21 años y con un talento respetable. Otro candidato para Román González.
Algunos expertos, sobre todo aquellos por cuyas venas corre sangre mexicana, lo catalogan como la gran sorpresa, e incluso, lo ponen a disposición de poder enfrentar con un poco de madurez a rivales de talla mayúscula como Román “Chocolatito” González, Carlos “El Príncipe” Cuadras, Luis “El Nica” Concepción o al propio Estrada.
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“Me gustaría medirme con ‘Chocolatito’ o con ‘El Gallo’, aunque lo más viable en la búsqueda de un cinturón sería ‘El Nica’ Concepción”, comentó Nery la noche del sábado en su natal Baja California, donde consiguió la graduación boxística al noquear en dos rounds a Richie Mepranum, tres veces retador a coronas del mundo.
La idea de querer tener a “Panterita” encerrado en una jaula con un “Chocolatito” en plena ebullición boxística o con un “Gallo” Estrada establecido, podría significar para el muchacho un freno en seco, el choque con una realidad dura. Sí, es valiente; sí, está invicto; sí, tiene pegada —prueba de ello son sus 15 nocauts en 21 combates— pero a ese nivel solo sería lo que su apodo dice que es: una “Panterita”.
De cualquier modo, aunque el de Tijuana camina sobre una alfombra sin mancha en la división de las 118 libras, en la que es segundo clasificado del CMB para retar por la corona mundial al japonés Shinsuke Yamanaka, el coqueteo con las 115 libras ha sido permanente por la cantidad de figuras consagradas a las que podría enfrentar.
Posibilidad lejana
“Chocolatito” espera negociar una bolsa digna para su siguiente combate en febrero de 2017 y aunque “Panterita” no suena en este instante con tanta fuerza como una revancha con Cuadras, no hay que perderle la mirada.
Nery empieza a tener notoriedad en las divisiones pequeñas. Su victoria sobre Richie Mepranum llama la atención, pero necesita madurez y rivales con nombre de peso.