El Real Madrid regresa a la Copa del Rey, competición en la que la pasada temporada fue eliminado tras el primer partido por alineación indebida del ruso Denis Cheryshev, para medirse a una Cultural y Deportiva Leonesa ambiciosa, líder en su grupo de Segunda B con un proyecto sólido y buena inversión.
Vuelve a escena lo ocurrido el 2 de diciembre de 2015, en la última entrada en la competición copera del Real Madrid, cuando Rafa Benítez y sus ayudantes cometieron un error que provocó la inmediata eliminación.
Cheryshev jugó y marcó en el Carranza con un partido de sanción por cumplir de su etapa en el Villarreal, y no hubo defensa posible para el paso más fugaz de la historia del Real Madrid en la competición copera.
Ahora, debuta Zinedine Zidane en Copa, con la obligación de mostrar en el terreno de juego la enorme distancia existente con un equipo de máximo potencial de Segunda B. Con rotaciones y minutos para los jugadores que piden paso, como Lucas Vázquez y Álvaro Morata, y también con minutos para la reivindicación de Mariano y hasta hueco para la vuelta a los terrenos de juego de Fabio Coentrao.
En Madrid se quedan ocho titulares indiscutibles. Por lesión Sergio Ramos, Casemiro y Luka Modric y por decisión técnica la BBC —Karim Benzema, Gareth Bale y Cristiano Ronaldo— más Keylor Navas y Marcelo. Llega el momento de demostrar que merecen más jugadores como James Rodríguez, a quien su última lesión le ha vuelto a frenar en seco.
La portería en Copa del Rey será para Kiko Casilla, titular en todas las competiciones en el inicio de temporada hasta que Keylor se terminó de recuperar de la operación a la que se sometió en verano.
Así llega
La Cultural y Deportiva Leonesa vuelve a vivir hoy ante el Real Madrid, como hiciese hace siete años frente al Barcelona, una jornada histórica de Copa del Rey, con el aliciente añadido en esta ocasión del gran momento deportivo y también de estabilidad económica en que se encuentra la entidad.
Los leoneses son líderes en su grupo de Segunda División B, siguen sin conocer la derrota en la temporada, tanto en Liga como en la Copa del Rey, y pueden presumir de un olfato goleador que les ha convertido en temibles después de anotar 27 goles en 10 encuentros.