Casi todas las 44 elecciones que se han realizado en la historia del país han estado salpicadas de irregularidades. Las siguientes son las más sobresalientes.
1856: La elección de William Walker como presidente de Nicaragua no solo fue ilegal porque él era un extranjero, sino también por las muchas irregularidades con que se realizaron. Las listas oficiales fueron falsas, se reportaron votos en lugares donde no hubo votación. Un norteamericano comentó: “En algunas poblaciones le dan a Walker más votos que el cuádruple de los habitantes, contando a todos los hombres, mujeres, niños y bestias”.
1862: El presidente Tomás Martínez lanzó su candidatura a pesar de que la Constitución de la época prohibía la reelección. En las votaciones tanto Martínez como el opositor José Joaquín Cuadra lograron una elección popular, por lo que correspondió al Congreso decidir quién sería el ganador, inclinándose al final por Martínez. Esa decisión provocó airadas protestas y una breve guerra cuando opositores aliados con otros centroamericanos pretendieron invadir el país y sacar a Martínez del poder, pero al final los rebeldes fueron derrotados.
1912: Antes de las elecciones Adolfo Díaz era el presidente “temporal”, y los Estados Unidos lo impusieron como candidato. El único contrincante que tenía, Luis Mena, tuvo que salir al exilio, derrotado por los marines. Las elecciones se realizaron en medio de la ocupación de las tropas norteamericanas.
1928: Después del pacto del Espino Negro, los norteamericanos le habían prometido la presidencia a José María Moncada. El general norteamericano Frank McCoy contó los votos y declaró vencedor a Moncada. Alejandro Cole Chamorro escribió: “Fueron unas elecciones prefabricadas (por el Departamento de Estado)”.
1936: Anastasio Somoza García era el jefe de la Guardia Nacional y sobrino del presidente Juan Bautista Sacasa, dos elemetos que le impedían postularse como candidato presidencial. Para eliminar ambos obstáculos, primero obligó a Sacasa a renunciar y luego renunció él a la dirección de la Guardia. Aún así, para el día de las elecciones solo iba a tener cuatro meses de haber renunciado, y según las leyes debía ser seis meses antes, por lo que logró la complicidad de la Asamblea para retrasar por dos meses el día de las elecciones y finalmente resultó ganador.
1947: Somoza García impuso a través del fraude a su candidato Leonardo Argüello Barreto. En ese entonces a la gente la obligaban a votar haciendo filas según el candidato por el cual iban a votar. Eran más grandes las filas por el candidato opositor Enoc Aguado. Al final se cambiaron los votos de Argüello por los de Aguado y resultó vencedor el primero. En estas elecciones fue cuando se escuchó decir entre carcajadas al presidente del tribunal electoral, el somocista Modesto Salmerón: “Voten, voten, que luego cuento yo”.
1957: Después de los sucesos de abril de 1954, y sin saber que sería asesinado dos años después, Somoza García hizo reformar la Constitución para eliminar la prohibición de la reelección y también para evadir el obstáculo de que los militares no podían ser candidatos. De esa manera también asegura que si le pasaba algo a él, sus hijos podían ocupar la silla presidencial. De esa manera pudo ser electo presidente Luis Somoza Debayle en 1957, apenas un día después que quitaron el estado de sitio tras la muerte de su padre, en unos comicios supervigilados por la Guardia Nacional.
1974: Tras el pacto Kupia Kumi con Fernando Agüero, con el que logró eliminar la prohibición de la reelección en la Constitución, y luego de pasar encima del triunvirato, Anastasio Somoza Debayle se reeligió en elecciones populares para el período 1974 – 1981, pero fue derrocado por los sandinistas en el 79.
1984: Tras el triunfo de la Revolución Popular Sandinista (RPS), los sandinistas tenían el control total del Estado y así realizaron elecciones con una oposición debilitada. Ganó Daniel Ortega.
1990: Aunque los sandinistas creían tener segura la victoria electoral, una gran mayoría del pueblo le dio el triunfo a doña Violeta Barrios de Chamorro.
2006: Gracias al pacto de Daniel Ortega con el liberal Arnoldo Alemán, quien permitió que se bajara el techo electoral al 35 por ciento para ganar las elecciones, el candidato sandinista retornó al poder al obtener el 38 por ciento de los votos favorables y sacar más de cinco puntos de ventaja sobre su más cercano perseguidor.
Las formas en que se ha burlado a la Constitución Política
En su intento de perpetuarse en el poder, los caudillos políticos han utilizado tres formas para burlar la prohibición de la reelección en la Constitución Política de Nicaragua:
- Reformando el artículo que prohíbe la reelección (con la complicidad de la Asamblea Nacional), o también toda la Constitución. Por ejemplo, José Santos Zelaya, cuando reformó la Libérrima.
- Imponiendo a un subalterno o títere que actuará bajo las orientaciones del caudillo. Por ejemplo, Emiliano Chamorro cuando en 1920 impuso a su tío Diego Manuel Chamorro.
- Dando un golpe de Estado, como Emiliano Chamorro, cuando dio el Lomazo a Carlos Solórzano.
Cortas sobre las elecciones:
El primer Jefe de Estado: Manuel Antonio de la Cerda, electo en las primeras elecciones de la historia del país en 1825. De la Cerda es también el primer gobernante en sufrir un golpe de Estado y no terminar su período.
Primer presidente: Frutos Chamorro, electo por una constituyente en 1854.
Primer presidente electo por voto popular: Tomás Martínez, en 1857.
Elección más ilegal: En 1856, cuando se hizo elegir el filibustero William Walker.
Los caudillos que más han buscado la reelección: Tomás Martínez, José Santos Zelaya, Anastasio Somoza García y Daniel Ortega.
Primer presidente que muere en el cargo: Evaristo Carazo.
Primer dictador: José Santos Zelaya, gobernó Nicaragua desde 1893 hasta 1909.
Primera ley electoral: La Ley Dodds, en 1923.
Primeras elecciones en que votaron las mujeres: En 1957.
Curiosidades sobre las elecciones
En varias ocasiones ha habido más de un gobierno a la vez, como en 1856 cuando había tres presidentes: Patricio Rivas, Fermín Ferrer y José María Estrada.
En 1928, un norteamericano, el general Frank MacCoy, era el presidente del tribunal electoral (Consejo Nacional de Elecciones). En las elecciones de ese año los votos fueron contados por marines norteamericanos.
Anastasio Somoza García no quería que las mujeres votaran porque tenía miedo a la influencia que sobre ellas ejercía la Iglesia Católica, porque pensaba que la mayoría de los sacerdotes simpatizaban con los conservadores.
A pesar de haber sido electo como Supremo Director de Estado en 1850 (así se le llamaba al presidente de Nicaragua en esa época), José Laureano Pineda no quería asumir el cargo porque su padre, Pedro Benito Pineda, había sido asesinado por ostentar ese mismo cargo.
Vicente Cuadra, electo presidente de Nicaragua en 1870, tuvo que someterse a la “vergonzosa” prueba de sangre para determinar si era descendiente de mulatos, lo cual era así, porque era nieto de José Miguel de la Quadra, casado con la mulata Agustina Montenegro.
En los años 1800, cuando había guerras, los presidentes abandonaban el cargo para ponerse al frente del ejército.
En las elecciones de 1950, cuando fue reelecto Anastasio Somoza García, en los centros de votación sus partidarios le entregaban una tarjeta conocida como La Magnífica, a todas las personas que demostraban que le habían dado su voto al dictador. Luego, con esa tarjeta el votante recibiría favores del gobierno electo.
Las elecciones por voto ppopular
Desde la declaración de independencia de Nicaragua, ocurrida en 1821, hasta la actualidad, se han realizado 43 elecciones de presidentes por voto popular en la historia del país. La del próximo 6 de noviembre sería la número 44.
1825 – Manuel Antonio de la Cerda
1826 – Juan Argüello
1829 – Dionisio Herrera
1834 – José Zepeda
1837 – José Muñoz
1841 – Pablo Buitrago
1843 – Manuel Pérez
1845 – José León Sandoval
1847 – José Guerrero
1849 – Norberto Ramírez
1850 – José Laureano Pineda
1853 – Frutos Chamorro
1854 – Francisco Castellón (Solo entre demócratas)
1856 – William Walker
1857 – Tomás Martínez
1862 – Tomás Martínez
1866 – Fernando Guzmán
1870 – Vicente Cuadra
1874 – Pedro Joaquín Chamorro Alfaro
1878 – Joaquín Zavala
1882 – Adán Cardenas
1886 – Evaristo Carazo
1890 – Roberto Sacasa
1901 – José Santos Zelaya
1905 – José Santos Zelaya
1912 – Adolfo Díaz
1916 – Emiliano Chamorro
1920 – Diego Manuel Chamorro
1924 – Carlos Solórzano
1928 – José María Moncada
1932 – Juan Bautista Sacasa
1936 – Anastasio Somoza García
1947 – Leonardo Argüello
1950 – Anastasio Somoza García
1957 – Luis Somoza Debayle
1963 – René Shick
1967 – Anastasio Somoza Debayle
1974 – Anastasio Somoza Debayle
1984 – Daniel Ortega Saavedra
1990 – Violeta Barrios de Chamorro
1996 – Arnoldo Alemán Lacayo
2001 – Enrique Bolaños Geyer
2006 – Daniel Ortega Saavedra
2011 — Daniel Ortega Saavedra
En esta lista no se incluyen a los gobernantes que subieron al poder por revoluciones, golpes de Estado o porque fueron designados por la Asamblea Nacional o constituyente.