Para abastecer la demanda de efectivo, facilitar al público la realización de sus transacciones y reducir el número de billetes en estas, el Banco Central de Nicaragua (BCN) pondrá en circulación un billete de mil córdobas.
Pese a las suspicacias sobre una posible devaluación del córdoba que generó en algunos sectores de la población la entrada en circulación de este billete que será el de más alta denominación del país, la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) descarta dicha posibilidad.
Funides asegura que dicha emisión era necesaria para reducir los costos de las transacciones.
“Tiene un costo no tener billetes de alta denominación, hay transacciones de alta denominación que por su naturaleza es más cómodo realizarlas con billetes de alta denominación”, dijo el director ejecutivo de Funides, Juan Sebastián Chamorro.
La nueva denominación comenzará a circular el próximo 1 de diciembre. Está impresa en sustrato de papel, es de color verde oscuro y mide 161 milímetros de ancho por 67 de alto, es decir, cinco milímetros más de largo que el billete de quinientos córdobas.
Además, tiene dos diseños diferentes: el primero comenzará a circular el 1 de diciembre y por ser conmemorativo del centenario de la muerte de Rubén Darío tendrá una circulación limitada. Este lleva en el anverso el retrato del poeta, un verso de su poema Pax y la imagen de una margarita; y en el reverso, la imagen de una paloma de la paz y otro verso del poema Pax.
El otro diseño, alusivo a la soberanía nacional, comenzará a circular regularmente a partir del 2 de enero del 2017. Lleva en el anverso la imagen de la Hacienda San Jacinto y en el reverso, la del río San Juan. Ambos llevan la firma del presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes, y del ministro de Hacienda y Crédito Público, Iván Acosta, informó el BCN en conferencia de prensa a la que LA PRENSA no fue invitada.
Entre las medidas de seguridad que presenta el nuevo billete figuran un hilo de seguridad con imagen tridimensional que se mueve al inclinar el billete, sello de tinta con efecto dinámico y cambio de color y marca de agua con la imagen del árbol de madroño.
Chamorro recuerda que en 2010, cuando se emitió el billete de quinientos córdobas que circula actualmente, también se generó el temor de una posible devaluación y efectos en la inflación. De acuerdo con un análisis de regresión realizado por Funides, no existe evidencia de que la emisión del billete de quinientos córdobas haya influido en la inflación.