Erika Julieta Siézar López, quien a finales de 2015 denunció en las redes sociales que tres primates habían sido aniquilados a balazos, en el sector de playa El Remanso de San Juan del Sur, se encuentra a la espera de lectura de sentencia desde julio del año pasado cuando fue condenada por diversos delitos. Sus familiares denunciaron retardación de justicia.
María José Siézar López dijo que a su hermana le montaron una acusación “sin pies ni cabeza, pues la señalan de crimen organizado y mi hermana pasaba todo el tiempo trabajando, la señalan de llamar a los delincuentes para que les roben a los turistas que visitaban su bar en playa El Remanso, y ahí ni siquiera hay señal de teléfono de ninguna de las dos empresas de líneas celulares, todo eso es absurdo”.
María José explicó que a su hermana las autoridades también le inventaron el delito de tenencia ilegal “porque en su casa le encontraron los casquillos de bala con que mataron a los monos congo, y los tenía porque un policía se los dio, y ella (Erika Julieta) los tenía guardados. En el juicio no le pudieron comprobar nada, si las víctimas de robo no la reconocieron y ahí la tienen presa injustamente”.
Erika Salaudy Cruz Siézar, hija de Erika Julieta, considera que detrás de la acusación “hay una venganza por denunciar la muerte de los monos congo y por apoyar a un grupo que tumbó una cerca en la costa de playa El Remanso, de San Juan del Sur con el fin de garantizar el libre acceso a las costas”.
José Daniel Espinoza Bejarano abogado defensor de Erika Julieta refirió que todo el proceso en contra de su defendida ha estado lleno de irregularidades, con pruebas contradictorias y vencimiento de términos.
Detalló que desde el 5 de julio que fue la última audiencia de juicio, siguen esperando que la titular de ese Juzgado, Anabel Moreno Villalobos, dicte sentencia.
Desde marzo
Erika Julieta fue detenida por la Policía el 20 de marzo 2016, acusada junto con su cónyuge José Andrés Zapata Cárdenas, de ser parte de una banda dedicada a cometer robos con intimidación a turistas extranjeros. Un tercer acusado (sin detener) es señalado como el supuesto jefe de la banda.
El juicio inició el 4 de mayo 2016 y la última audiencia de juicio fue el 5 de julio del mismo año.