A pesar de una menuda figura, de 5 pies y 11 pulgadas, con 165 libras de peso, Jonathan Loáisiga es capaz de soltar fuego al home plate.
El prospecto nica de los Yanquis de Nueva York subió varias millas de velocidad tras la operación Tommy John y ahora alcanza las 98 MPH en sus disparos más duros al plato.
Si juntamos esa poderosa bola rápida, con una curva de quiebre violento, tipo la de JC Ramírez, más el cambio de velocidad y el slider, Loáisiga tiene un amplio repertorio que lo hacen portados de muchas esperanzas.
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Por el momento, el nica de 22 años de edad está en la categoría Rookie para completar su rehabilitación. En su última salida tiró cuatro entradas sin carreras ante Toronto ye ste ha sido su recorrido más largo.
Su rehabilitación comenzó a finales de junio tirando un inning y gradualmente ha ido recibiendo más carga de trabajo, para no forzar su brazo.
Próximo año clave
El próximo año será clave para él, porque totalmente recuperado, será soltado a una categoría superior, algo así como Clase A o Clase A fuerte.
Mientras tanto, seguirá provocando terror entre los jóvenes bateadores de la Liga de Novatos de la Costa del Golfo.