La Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) responsabilizó al Estado de Nicaragua de lo que pueda pasar con el exlíder de los Cachorros de Sandino, Marvin Vargas.
Pablo Cuevas, asesor legal de la CPDH, afirmó que han conocido por parte de la familia de Vargas que familiares de otros internos les comunicaron que desde el martes pasado, está sufriendo de dolores en el pecho sin que los funcionarios del penal le hayan prestado el auxilio debido.
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Ellos temen que Vargas sufra algún infarto, pues es hipertenso y desde hace varios meses no recibe medicamentos ni la atención médica adecuada, conoció el funcionario de la CPDH. Cuevas fue informado que en respuesta, Vargas más bien habría recibido maltrato verbal de parte de los custodios en la penitenciaría.
A los familiares de Vargas no les han permitido verle, y lo que han conocido es por parientes de otros internos que les aseguran que el problema de salud persistía ayer y en represalia por sus insistentes llamados de auxilio, los funcionarios de la Galería 300 “lo llegaron a esposar a una de las literas”. “Ellos (sus familiares) temen un desenlace fatal (…) pues no está recibiendo medicamentos ni está recibiendo atención médica y más bien está siendo reprimido de la peor manera, nosotros hacemos del conocimiento público y hacemos un llamado a la autoridad”, denunció el funcionario de la CPDH.
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Cuevas señaló que hay un ensañamiento contra Vargas, y “hay una violación reiterada a sus derechos humanos y eso nos tiene sumamente preocupados”.
