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Ex capitana se declara “víctima” de su marido

LEOPOLDO ARIAS – Corresponsal MASAYA.– La ex capitana de la Policía Nacional, Ester Concepción Ruiz Téllez, se declaró “víctima” de su marido, el también ex capitán Salvador Napoleón Silva Espinosa, diciendo ante la Jueza de Distrito Penal, que éste ejercía un pleno dominio sobre su persona, llegando hasta el extremo de darle maltrato físico. La […]

LEOPOLDO ARIAS – Corresponsal

MASAYA.– La ex capitana de la Policía Nacional, Ester Concepción Ruiz Téllez, se declaró “víctima” de su marido, el también ex capitán Salvador Napoleón Silva Espinosa, diciendo ante la Jueza de Distrito Penal, que éste ejercía un pleno dominio sobre su persona, llegando hasta el extremo de darle maltrato físico.

La jueza, Dra. Martha Jeannette Sandino, abrió juicio contra el matrimonio de ex capitanes Silva Espinosa y Ruiz Téllez, así como a los ciudadanos Dámaso José Vega López y Oscar Antonio Gutiérrez Flores, por tráfico interno de estupefacientes, psicotrópicos y otras sustancias controladas.

La acusación incluye a José Dolores Ruiz y Roberto Membreño, que están prófugos y circulados en todo el territorio nacional.

Al ser interrogada por los abogados defensores, Manuel Martínez y Martín Ráudez, la señora Ester Ruiz manifestó que su esposo se iba de la casa hasta tres y cuatro días, negando desconocer a qué se dedicaba su marido.

Afirmó que los vecinos le decían que llegaba gente extraña a su casa, y que su marido recibía muchas llamadas de mujeres. Dijo conocer al procesado Oscar Gutiérrez porque es esposo de su hermana Alicia, y a Dámaso Vega, porque llegó a vivir en la Villa Bosco Monge.

A preguntas de uno de los abogados que si tenía un amigo dentro de la Policía al que le decían “Ratón”, la indiciada respondió afirmativamente diciendo que se trataba de su ex jefe de los años 80, y que era el subcomisionado Róger Ramírez Guzmán.

UN PASEO PARA INVOLUCRARLO
Oscar Antonio Gutiérrez Flores, de 44 años, concuño de Salvador Napoleón, recordó ante la jueza cuando a inicio de enero del 99, Salvador lo visitó a bordo de una camioneta Trooper, para invitarlo a un paseo al mar con la familia.

Primeramente no lo aceptó porque no tenía dinero, pero Salvador insistió diciéndole que asumiría los gastos y que a las cinco de la mañana pasaría un camión color verde con franjas amarillas en las puertas, llevándolo a San Juan del Sur, pero antes de llegar a ese lugar tomaron un camino que los trasladó a El Ostional, hasta llegar a una finca que tenía apariencia de estar abandonada.

“Estando allí se apareció una camioneta tipo Jeep Station Wagon, de color rojo y otra azul, ambas sin placas. Luego Salvador le dijo que acomodaran de ocho a diez sacos, que venían llenos de paquetes cuadrados o rectangulares”.

Luego cubrieron la carga con un plástico negro y Salvador habló con el conductor del camión diciéndole que lo esperaría en el Empalme de Catarina, de allí continuaron la marcha hasta la entrada a Las Flores, donde un hombre con una carreta halada por bueyes esperaba. Bajaron la carga y enrumbaron sobre el camino que conduce al poblado del mismo nombre, según declaró Oscar Antonio.

Empero, en interrogatorio hecho a Salvador Napoleón Silva Espinosa, en una sala del Hospital “Carlos Roberto Huembes”, en presencia de funcionarios de un juzgado capitalino, el indiciado dice que no tiene “nada que ver en eso”, no obstante admitió que su declaración rendida en la Policía está correcta, con ciertas diferencias.

PRESIONADO
Otro de los que ya rindió declaraciones en el Juzgado de Distrito Penal de Masaya es Oscar Gutiérrez Flores, quien manifestó ante la judicial que tuvo que firmar en la Policía de esta ciudad, por presión y donde lo involucran con Salvador en el tráfico de droga.

Dijo que la Finca Divino Niño es propiedad del ex capitán del Ejército, Salvador Silva y la de “El Yanqui” no sabe. Además negó haber andado en paseo y montar sacos con ese tipo de estupefaciente.

Al Juzgado de Distrito Penal de Masaya llevaron 130 kilos de cocaína, de los cuales 120 incautó la Policía local, y 10 en Managua. La Jueza Sandino ordenó romper el sigilo bancario, solicitando el estado de las cuentas de banco que posean cada uno de los acusados de narcos  

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