- Pipas de ENACAL son insuficientes
- Médicos temen epidemias
NOEL HERNÁNDEZ [email protected] [email protected]
La desesperación por obtener agua fue evidente ayer entre miles de personas que habitan las zonas altas de Managua, cuando corrían a las cisternas de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (ENACAL), que llegaron a abastecer con ese líquido a los 26 barrios afectados.
Según reportes de la empresa, sólo seis cisternas distribuirán el agua las 24 horas del día, con el apoyo de la Dirección General de Bomberos de Managua. Sin embargo, los habitantes se quejaban de que el agua no alcanza para todos.
Muchas personas como la señora Carmen Cuadra, madre de tres niños, tuvieron que regresar a sus hogares con sed y los baldes vacíos.
“Mucha gente no alcanzó agua, porque ahorita nos avisaron que venían las pipas y hemos venido desde largo para acarrearla”, expresó Cuadra.
Dijo que desde hace cuatros días ha hecho un sobreesfuerzo en busca de agua, además de alimentar a sus hijos, quienes han dejado de ir al colegio porque no ha podido lavarles los uniformes.
El desabastecimiento en los 26 barrios fue ocasionado por un incendio en el circuito eléctrico del campo de pozos del proyecto “Japón-Managua 1”, ubicado en el kilómetro 15 y medio de la Carretera a Masaya.
Este campo de pozos, ubicado en la entrada de Ticuantepe, producía 15 de los 90 millones de galones de agua que consumen cada día los managuas.
LA PRENSA constató que desde tempranas horas de la mañana, miles de pobladores del Reparto Schick salen de sus casas desesperados por encontrar quién les regale o venda un poco de agua.
PREOCUPACIÓN EN CENTROS DE SALUD
En el Centro de Salud “Carlos Rugama”, del Reparto Schick, han pedido al personal y pacientes que lleven agua hervida para las curaciones, expresó Nancy Zamora, subdirectora de atención médica.
“Estamos esperando que se nos pueda dar alguna eventualidad, sobre todo un incremento en las enfermedades diarreicas agudas porque vemos que la población anda con sus baldes en las calles buscando agua”, manifestó Zamora.
Explicó que la falta de agua provoca que la gente tome agua almacenada, con lo cual se corre el riesgo de que aparezcan brotes de enfermedades, que es un temor latente.
También incide en la aparición de enfermedades febriles, como el dengue o la malaria, porque las personas almacenan agua que muchas veces sirve como criadero de mosquitos, dijo José García, responsable de higiene del centro de Salud de San Judas “Edgard Lang”.
Indicó que el problema del agua “es una bomba de tiempo”, en ese y todos los barrios aledaños.
“Ya es rutina que en el centro de salud no haya agua porque se va desde las seis de la mañana hasta las siete de la noche, pero ahora con el desabastecimiento no ha habido del todo”, expresó García.
“A nosotros como centro nos afecta porque no hay agua para los baños, ni para tomar, ese es un problema serio”, puntualizó.
Los centros de salud de San Judas y Reparto Schick cubren gran parte de las zonas en que hay desabastecimiento.
ENACAL informó que en los próximos días se irá cubriendo el déficit de agua y por el momento extrae 8.5 millones de galones por día, adicionales a los ocho millones que saca normalmente de la Laguna de Asososca.